Cuaderno Africano

El héroe olvidado

La Razón
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17 de enero de 1961. Patrice Lumumba muere, asesinado. Un asesinato del que fueron cómplices belgas y norteamericanos. Un asesinato por el que nadie ha pagado realmente. Un asesinato que cambió el curso de la historia de un país que trataba de "renacer"de un atroz colonialismo.

Han pasado 50 años y el sueño del héroe congoleño no se ha cumplido. Poco antes de su muerte, describía, desde la cárcel, en una carta a su mujer (publicada ahora por Jeune Afrique), sus anhelos para un país cuya independencia ha transformado "en una jaula". A pesar de todo, "mi fe permanecerá inquebrantable", explicaba, convencido de que "tarde o temprano mi pueblo se deshará de todos sus enemigos interiores y exteriores"...

Concluía con un "No llores, mi compañera. Yo sé que mi país, que tanto sufre, sabrá defender su independencia y su libertad".

Creyó que la independencia marcaba el fin de la explotación, de la injusticia. Sus palabras de denuncia, sus verdades y su proximidad a la Unión Soviética construyeron su ataúd.

Hoy, su legado ha caído en el olvido. Las multinacionales se frotan las manos con las riquezas del gigante africano. La serenidad política no alcanza todo el territorio. La paz es una palabra vacía...