No es lo que parece

La sucesora de Cascos no convence

La Razón
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La desconocida Isabel Pérez Espinosa está causando bastante mala impresión dentro del PP a quienes empiezan a conocerla y, especialmente, a los miembros de la dirección nacional que últimamente se han dejado caer por Asturias, por cierto, con el objetivo de apoyarla en su guerra sin cuartel contra Francisco Álvarez Cascos. Está enfrentada casi con todo el partido regional, y el número de desafectos va a más. Dicen también de ella que tiene demasiadas carencias políticas, que le falta discurso, que no está a la altura de lo que se espera de un candidato al Principado de Asturias. Y critican su propensión a montar escenas, como su infantil enfado con la presidenta del PP de Gijón, Pilar Fernández Pardo, durante una visita a la tierra de la portavoz en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría. En resumen, que en el PP se extiende la preocupación por los resultados electorales que puedan obtener en esa comunidad autónoma y cada vez son más los que temen que Cascos pueda ser el "Revilla asturiano", es decir, el líder del partido bisagra que acabe ocupando el sillón del Principado.