Anaya y la PAC

Este fin de semana ha fallecido en Madrid Alfonso Anaya. Para la inmensa mayoría de los agricultores y ganaderos resultará una persona desconocida, pero deben saber que su papel ha sido clave en los procesos negociadores que han tenido lugar entre España y la UE desde antes de la integración de nuestro país en la entonces CEE. Ha servido con lealtad a los gobiernos de distinto signo político, desde la UCD hasta el PP, pasando por los socialistas, aunque en algunos casos puntuales no quisiesen contar con él. Participó también como experto agrícola de la delegación de Madrid que negoció las Perspectivas Financieras desde los años 90 hasta 2007, cuando fue nombrado consejero agrícola de la Embajada de España en Argentina. En resumen, que se trata de una de esas personas que no salen en los «papeles», a pesar de tener un «papel» importante en su actividad como funcionario y alto cargo.

Sus conocimientos no hubiesen venido mal ahora, cuando hay que pactar la aplicación de la nueva PAC en España. La semana pasada comenzaron las reuniones de los grupos de trabajo que se han creado con el objetivo de, por ejemplo, definir al agricultor y ganadero activo con derecho a recibir ayudas de la PAC. Del primer encuentro se deduce que las comunidades autónomas están bastante divididas sobre esta definición y, lo que es peor, que algunas de ellas no tienen las ideas claras. También toca decidir sobre las ayudas acopladas. Lamentablemente ya no se podrá contar con su experiencia, aunque fuese desde Buenos Aires.