Dualidad

El Getafe, suspendido en el abismo, en algunos pasajes del encuentro que perdió con el Madrid (1-5) le dejó en evidencia. El Rayo, atacado por un vértigo atroz a partir del 2-0, descubrió alguna debilidad madridista, no obstante el 2-3. Pellegrini define lo que le sucede a su antiguo equipo: «Es letal y vulnerable». ¿Escorpión o rana? Por partes, con jugadores como Cristiano, Bale y Benzema, con alternativas como Lucas, Jesé, Isco o James; con propulsores como Modric, Kroos o Casemiro; con un cohete como Marcelo y un cabeceador como Ramos, ¿cómo puede sufrir tanto en determinadas fases de los partidos? Pues tiene razón Pellegrini, porque es vulnerable. Porque se desorienta y porque si no se aplica con el interés, la intensidad, la concentración y la solidaridad que demostró en el Camp Nou, en aquel clásico que cambió la Liga, el Manchester City, otra alarmante dualidad, le puede amargar el sueño de la Undécima. Posee materia prima suficiente para presentarse en la final, así que, cuidado.

El Madrid tiene que concretar para vencer, o toro o torero, y espabilar, con la defensa fraguada, el centro del campo preciso y los de la BBC, con o sin Benzema, iluminados y estajanovistas como si jugaran en el Atleti. El City flaquea por la retaguardia y eso es una ventaja para Cristiano y Bale; pero arriba, con Agüero y De Bruyne, impone. Y si juega Jesús Navas porque Silva está fastidiado, que Zidane destierre alinear a Danilo para evitarle un sufrimiento continuo. La determinación es fundamental, como la de Nadal al denunciar a la ex ministra Roselyne por bocazas.