Fuera demagogia

Algunos políticos, de todos los partidos, coinciden -cosa rara- en una reivindicación demagógica y, por tanto, imposible de satisfacer: la reclamación de una deuda histórica de 11.000 millones de euros. Digo imposible de satisfacer, porque no se nos debe. Cuando se instauró el injusto sistema de financiación, nadie dijo que la diferencia con otras regiones se nos pagaría más adelante y, lo que es peor, nadie lo pidió.

E presidente de la Generalitat acierta en abanderar la aprobación de un sistema más justo. Todos estamos con él. No podemos permitirnos el lujo de ser los que menos recibimos por habitante. Pero de nada valdrá el esfuerzo si desgastamos nuestras fuerzas en algo inviable. No nos tomarán en serio. Esta vez discrepo de mi amigo Rogelio, partidario de reclamar la Luna para lograr algo. A quien pide la Luna, ni le consideran.

Fabra, en mi opinión, debe comprometer al Gobierno a cambiar el modelo para 2015 y, en la medida de lo posible, a que acepte que lo que nos den estos dos años se considere como compensación de la injusticia que nos dispensan. Entonces sí será deuda. Da igual histórica o no. Así es la vida.