Toni Bolaño
Igualada versus Marruecos
Miles de personas salieron a la calle para reivindicar su sentimiento. Son catalanes y españoles. Suman las dos personalidades. No se estorban una a la otra. Al contrario, suman. Muchos llevaban camisetas hechas en Igualada por un industrial catalán. ¡Mira por dónde! No las hicieron en Marruecos como las que lucieron los independentistas el 11 de septiembre.
Familias enteras, con sus hijos, se concentraron en la Plaza de Cataluña para exhibir orgullosos que no quieren la independencia y que están hartos del pensamiento único. Ése que cuando dices que te sientes catalán pero que no renuncias a España, a ser también español, te cuelga el sanbenito de fascista. No están dispuestos a aceptarlo. Y lo han demostrado. En la Plaza de Cataluña de Barcelona había mucha gente. Eran los que estaban en cuerpo. Otros muchos estaban en alma. Había de todo. De derechas, de izquierdas, de centro. Autonomistas, centralistas, federalistas y algún confederado. PP y Ciutadans hicieron ostensible su presencia. El PSC no. Iniciativa per Catalunya, tampoco. Defienden el federalismo y rechazan la independencia. En la Plaza de Cataluña tenían su espacio. Han preferido ponerse de perfil y se han quedado fuera de foco. Muchos federalistas también estaban en la concentración. Han perdido una buena oportunidad. Y no están para perderlas.