Julián Redondo
La chistera
Media docena de aspirantes a la presidencia del Barça, actual campeón de Europa, de Liga y de Copa. En tiempos menos convulsos y sin asomo de aristas judiciales, Josep Maria Bartomeu sería el elegido por el «soci» azulgrana. No hay mejor conejo en la chistera que los tres títulos principales de la temporada. Ni siquiera el anuncio de fichajes estelares aumentaría en las urnas las posibilidades de los contendientes porque el equipo está muy bien confeccionado, a expensas del retorno de algún cedido, y no se admiten incorporaciones del exterior hasta enero de 2016. Jesús Gil y Gil accedió a la presidencia del Atlético con Futre en la bocamanga, y Figo fue el bombazo de Florentino Pérez cuando derrotó al tándem Lorenzo Sanz-Juan Onieva-La Octava. Este último caso demuestra que los trofeos no condicionan el éxito o el fracaso electoral. A priori, Bartomeu no encontrará rival entre Benedito, Freixa, Farré y Majó; pero la aparición de Laporta, más por lo que consiguió con Guardiola en el mascarón de proa que por su deriva independentista, debería ser la gran preocupación del presidente del «triplete».
Las conquistas deportivas son un aval interesante que pierden efectividad tras el rastreo de muertos en el armario, y a «Barto» le persigue el «escándalo Neymar». Laporta se ha hecho querer; pero ya está en el candelero. A saber si a falta de pichón en la chistera se gane con la barretina.
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