Toni Bolaño

La mentira original

Vic y Folgueroles debían quedar unidas por un ensayo de la cadena humana por la independencia. No lo han conseguido. Les han faltado eslabones. Necesitaban 4.300 personas. Solamente han reunido a unas 1.500 según el poco sospechoso diario nacionalista naciodigital.cat. Hasta TV3, consciente del fracaso, lo ha difuminado convenientemente «algunos puntos del recorrido estaban más llenos que otros» y no sale en titulares. La cosa no ha quedado para sacar pecho. Con el pinchazo a cuestas, los organizadores se han refugiado en excusas de mal pagador. Que si es agosto. Que si hacía mucho calor. Que si queda mucho trabajo por hacer.

El 11 de septiembre, la Asamblea Nacional Catalana quiere hacer una cadena humana. Le hacen falta 400.000 personas. Si el año pasado el 11 de septiembre reunió a más de un millón y medio de personas, a primera vista no parece que tengan que existir problemas. Sin embargo, los hay. Un año después, la manifestación que llevó a Artur Mas a convocar elecciones anticipadas y señalar el camino de la independencia se ha revelado como una gran mentira. Nunca hubo la gente que nos dijeron que había. Es su mentira original. Vendieron gato por liebre y ahora el gazapo empieza a hacerse evidente. Los seis kilómetros que separan Vic de Folgueroles son todo un ejemplo.