César Lumbreras

Los deberes de Cañete

Se puede decir que Arias se ha marchado de vacaciones, al tanto de los incendios forestales, eso sí, con los deberes hechos. En junio pasado, el Consejo Agrícola de la UE logró un acuerdo político sobre la reforma de la PAC, que, aunque todavía está pendiente de que el Parlamento Europeo ratifique el Marco Financiero para 2014-20, supone despejar muchas dudas. La delegación española consiguió dar la vuelta a la propuesta inicial de la Comisión Europea y alcanzó la mayor parte de sus objetivos. Luego, al llegar aquí, lo vendieron muy bien, incluso pasándose un poco en lo del "éxito"; se ve que Cañete ha aprendido de su primer mandato entre 2000 y 2004. Hace menos de dos semanas se consiguió un acuerdo básico para la aplicación en España de la nueva normativa; se han despejado también unas cuantas incógnitas, aunque permanecen abiertas otras muy importantes, como la definición de agricultor activo, los planes de comarcalización o los sectores que podrán recibir ayudas acopladas. En resumen, otro éxito también, pero con matices. A lo largo de este curso político se han aprobado dos leyes claves: una para mejorar el funcionamiento de la cadena alimentaria y la otra para concentrar la oferta por la vía de las cooperativas. En el agua y sin armar follón, se han sacado adelante la mayor parte de los planes de cuenca, un asunto explosivo. En resumen, que las cosas no le han ido mal y así lo refleja el último sondeo del CIS, ya que es el miembro del Gobierno mejor valorado, lo que significa que es «el más espabilado entre los suspendidos».