Ángela Vallvey

Me recuerda...

Oigo a unos españoles que salen por la tele decir que tal y cual país les recuerda «a España hace cuarenta años». Como estoy en pleno soponcio post-almuerzo –mi ética del trabajo, bastante prusiana, me impide llamarlo «siesta»– abro un ojo a duras penas, miro la pantalla entre brumas y distingo lo que me parece un monte xerófilo del Sáhara occidental y algunas imágenes rápidas que corresponden a la sabana inundada de algún gran río africano. Una pareja de elefantes, acacias y sericuras... Vuelvo a abrochar el párpado y me digo que, seguramente, esos españolitos no decían completamente en serio lo de que «este país me recuerda a España hace cuarenta años». Pero al poco, la cosa se repite. ¡Es una pauta!: incontables españoles declarando que Nigeria, Mali o China les recuerdan «a España hace treinta o cuarenta años». Lo más gracioso es que esos españoles parecen tener doce o quince años como máximo, así que sorprende la firmeza con la que afirman estar convencidos de que Tayikistán, Burundi o Sierra Leona son clavaditos a «España hace cuarenta o cincuenta años». Muchos de esos lejanos países han sido devastados por escalofriantes guerras civiles. Los niños oriundos de esos estados que «recuerdan a España hace cuarenta años» miran a la cámara con los ojos devorados por las moscas, pozos de inmensa tristeza que fruncen el corazón del espectador ibero (que plisan mi corazón como la máquina de una tintorería del alma). Oyendo a estos jóvenes viajeros españoles me pregunto qué clase de percepción tenemos de nuestro país y nuestro pasado. Según un estudio de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación, los españoles creen ser más altos y delgados de lo que realmente son..., lo que dificulta el tratamiento por sobrepeso.

¿Cómo veremos a España? (Casi prefiero no saberlo).