Fernando Rayón

«Nunca mueren»

Vivimos inmersos en tanta palabrería mezquina, en tantas declaraciones insulsas y fuera de lugar que cuando oímos mensajes claros y verdaderos nos quedamos un poco parados, sorprendidos por la fuerza de la palabra y de la verdad. El discurso de ayer del Príncipe de Asturias en Zaragoza, en la entrega a título póstumo de la Cruz al Mérito Militar al sargento David Fernández, fallecido en Afganistán al explosionarle un artefacto, han sonado a eso, a verdad: «Los que trabajan por la paz nunca mueren». Hace bien Don Felipe en acercarse a sus antiguos compañeros, al Ejército español, y acompañarlos en los momentos de dolor. Es de justicia, pero también en sus palabras nos hemos sentido todos identificados. No somos un país de grandes homenajes, pero el agradecimiento a los que dan su vida en acto de servicio, a los que trabajan por la paz, es algo necesario. Para agradecer, acompañar y, si es posible, no olvidar.