Miguel Ors

Odegaard, el «Niño» del Madrid

L19 Laia

Y Dios creó a la mujer, qué gusto, qué placer, y Dios puso a la mujer en el Rally Dakar, o sea a Laia Sanz; y la mujer, esto es, Laia, en el Dakar de este año ha terminado novena. Una mujer, por primera vez en las 36 ediciones del Dakar, en el «top 10» masculino. ¡Qué insulto para el sexo fuerte! El Dakar, como se sabe, es una titánica pugna entre el piloto (coche o moto) y la descarnada, hosca y fosca geología. El siglo XXI, concluyentemente, es el siglo de la mujer. Cada día que pasa, la mujer es más notoria que el hombre, de igual modo que el hombre, cada día que pasa, es menos notorio que la mujer. Laia está ya en la historia de las mujeres eminentes del deporte español: Theresa Zabell (vela); Arancha Sánchez Vicario (tenis); Gemma Mengual (natación sincronizada); Isabel Fernández (yudo); Mireia Belmonte (natación); Sheila Herrero (patinaje)...

M20 Wang Jianlin

La antigua y eterna China y la emergente y ecuménica China del siglo XXI. El color del dinero es amarillo (oro) y amarillo es el color de los que saben hacer dinero.

–Es verdad: Madrid se nos achina que es un primor.

El chino Wang Jianlin se nos ha hecho atlético. Es un fortunón: el número 101 del mundo, según la revista «Forbes». Plurales y heterogéneos sus negocios: cines, teatros, terrenos, el edificio España. La reoca. Cabeza prodigiosa: «Vale más tener una cabeza bien hecha que una cabeza bien llena». «Confuciano» otro de sus mandamientos: «Me preguntas para qué compro arroz y flores. Compro arroz para vivir y compro flores para tener algo por lo que vivir». ¿Flor el Atlético? Se infiere que sí, pues el fútbol sólo hace ricos a los jugadores, y no a todos. Ha invertido 45 millones.

Un atlético de siempre, de toda la vida, Juan Luis Colón:

–Si el Barça es más que un club y el Real Madrid es el mejor club del siglo XX, el Atlético, a partir de ahora, será más club de lo que es. Tiemblen aquéllos.

X21 Sufrir

Rafa Nadal es la experiencia y la inteligencia del sufrimiento. Casi nada: él es siempre casi nada. El sufrimiento es la ley de hierro de la naturaleza.

–¿Ha sufrido, sufre usted?

–Sí, si sabe lo que es la vida. Si no, usted no sabe qué es la vida.

Nadal es el único deportista que me hace sufrir.

–Anda, apaga la televisión, sufres más que Nadal, me dicen a veces en casa.

Lo suyo de hoy, en el Abierto de Australia, es otro capítulo épico para la historia de la épica. Se superó titánicamente ante sus desaciertos, sus dudas, sus dolores para, tras cuatro horas y doce minutos de sufrir, sufrir y sufrir, ganar a Smyczek.

–Me quito el sombrero ante Nadal –dijo el estadounidense–. No hay otro como él.

Pienso lo mismo.

J22 Cuesta, cuesta

¿Remontable en el Calderón el 1-0 de Barcelona? Pues sí, pues ya veremos. Berlusconi, empresario, político, mujeriego a tope, rico a tope y cachondo físico y mental, dijo hace días, a raíz de ser derrotado su Milán por su peso mosca, que «es inaceptable perder con jugadores que ganan cinco veces menos que los nuestros». El Atlético no es, hablando en euros, como el Madrid y el Barça, pero le respetan. «El Atlético, como el león, mete miedo», dice Piqué. «Cuesta, cuesta ganarle», dice Iniesta. «Ganarle es complicado», dice Luis Enrique. Esto es el Atlético. Podría decirse de él, parafraseando inversamente la famosa frase, que el Atlético siempre está y siempre se le espera. Berlusconi, hace tiempo: «El fútbol es como la vida: da gustos y disgustos. Qué encanto la vida, qué encanto el fútbol».

–Qué gusto si el Atlético le da al Barça el disgusto de caer en la Copa del Rey.

V23Niños

A los 16 años, ¿se es niño, adolescente, bachiller?

–Jugador del Real Madrid, con dos millones de euros al año.

Martin Odegaard, he aquí el «Niño» noruego del Real Madrid.

–El Atlético tiene al «Niño» Torres; nosotros, al «Niño» Odegaard.

Leo lo que se escribe de él, como en su día leí las loas a Illarramendi. «Ya tiene el Real Madrid sustituto para Xabi Alonso», se publicó. Illarramendi (30 millones), sin embargo, ha dejado de gustar en el Real Madrid. El fútbol, en términos económicos, es tremendo. Ahí está, en el Barça, Luis Suárez, fichado para hacer goles. «El gol es lo suyo». No lo huele su pituitaria azulgrana: sólo cinco goles. ¿Por qué era hacha goleadora en el Liverpool y no en el Barça?

–Florentino ha fichado a Odegaard –canturrean– para pisárselo al Barça.

Pudiera ser. El caso es que no se duerme en los laureles de Cristiano, Bale, Isco y James. Hay que sembrar para el futuro. Es de desear que Odegaard no sea otra versión del fallido Canales.