César Lumbreras

Otra locura

¿Qué calificación se puede dar a un Gobierno que se pasa por el arco del triunfo una sentencia de un tribunal de Justicia, en este caso el de la Unión Europea (UE)? ¿Debe mantener el presidente de ese Gobierno al responsable de semejante desatino? El sentido común dice que no. Pues bien, a fecha de hoy, que se sepa, Mariano Rajoy no ha cesado a Cristóbal Montoro y a todo su equipo, que llevan meses negándose a devolver lo que se había cobrado a los transportistas, y también a los agricultores, por el mal llamado «céntimo sanitario».

Han tenido que hartarse algunas organizaciones de transportistas y amenazar con una huelga de tres días, a partir del próximo lunes, para que el secretario de Estado de Hacienda, Miguel Ferre, otro que tal baila, haya abierto una puerta para buscar una solución, eso sí, después de llevar unos cuantos meses pasando de cumplir la sentencia y diciendo que, como mucho, devolverían una parte del dinero cobrado por ese concepto.

Lo que suceda a lo largo de esta semana afecta al sector agrario por partida doble. Por un lado, porque la solución que se dé a los transportistas valdrá también para los agricultores; por otro, porque si hay un sector que resultaría muy afectado por una huelga de este tipo, que pondría al país patas arriba, sería el agroalimentario, ya que muchos de sus productos son perecederos.

Éste no es el único asunto de las competencias de Cristóbal Montoro con grandes repercusiones para el campo. En su reforma fiscal se empeoran las condiciones para los que tributan en el régimen de módulos. Aunque en las últimas semanas se han introducido mejoras en las propuestas iniciales, la situación final será peor que la actual. ¿Se atreverá Montoro a decir que la reforma fiscal beneficia al campo? De él ya se puede esperar cualquier cosa.