Julián García Candau

Se va el Barcelona

El Barça tenía la oportunidad de distanciarse casi definitivamente del Ma-drid y sustancialmente del Atlético y lo hizo. El equipo rojiblanco no fue el que perdió en el Bernabéu. En medio tiempo hizo más juego que en todo el encuentro citado. En diez minutos creó más ocasiones de gol y a la media hora, en la tercera oportunidad, Falcao, al contragolpe rápido, batió a Víctor Valdés. Fue jugada que arrancó con una pérdida de Messi.

El Camp Nou enmudeció, pero cinco minutos después Adriano hizo un gol casi antológico. El equipo barcelonés se creció y el Atlético comenzó a padecer un asedio que concluyó en el minuto 45, con el tanto de Sergio Busquets en la embarullada jugada de córner.

El Atlético no llegó al Camp Nou acomplejado. Simeone ha convencido a sus jugadores de que ganar la Liga no es imposible y salieron a disputar la victoria con alegría, pero con la lección muy bien aprendida. Xavi, Busquets e Iniesta tuvieron encima marcadores que les impidieron manejar el balón como suelen. En tales circunstancias, Messi apenas apareció y tanto Pedro como Alexis no inquietaron. Al Barça le faltó un jugador más del gremio creativo en el centro.

La segunda diana azulgrana dejó al Atlético de Madrid muy tocado. La tercera fue el comienzo de su desaparición definitiva del encuentro. El Barcelona asumió entonces el mando de manera definitiva y el cuarto tanto sólo fue la guinda de Leo Messi, quien incluso en partidos en los que apenas aparece, cuando lo hace es para sentenciar y ampliar su inigualable récord de goles.

Posdata. José Mourinho, «el mejor entrenador del mundo», en otoño ya ha dicho adiós a la Liga. Insólito en el Santiago Bernabéu.