Sofisma de ETA

El problema de ETA es el delito y éste se resuelve con la Ley. Afirmar que los gobiernos de España y Francia tienen un problema político con la banda terrorista en su deseo de entregar las armas solo alcanza la categoría de sofisma. De ahí que la declaración de la portavoz de EH-Bildu, Laura Mintegi, provenga más de la intransigencia que de un deseo real de erradicar el asesinato y la extorsión de su actividad. Que no lo haga tan complicado. La solución es sencilla: entrega las armas y ponerse a disposición de la Justicia. Como cualquier ciudadano. Después de haber matado a más de 800 personas en plena democracia, cualquier pretensión de inmunidad no deja de ser una osadía inaceptable. Como inadmisible es el intento de introducir una negociación de la alternativa KAS en una cuestión penal.

En cuanto a lo político, quienes tienen el problema son Laura Mintegi, su coalición y el nacionalismo, en general, y esa cuestión en democracia se dirime en las urnas mediante el acatamiento de la Constitución. Las elecciones son el escenario para lo político y las leyes, las reglas que las rigen.

Algunas de las manifestaciones de Mintegi me trajeron a la memoria algo parecido a (creo que Benedetti) «el mayor error de las personas es querer sacarse de la cabeza lo que no tienen en el corazón». Precisamente, esa es característica del perverso, del que dispara en la nuca o hace estallar la bomba.

Si de verdad ETA quiere la paz, que lo demuestre. Con hechos, no solo con palabras. Así es la vida.