César Lumbreras

Soraya del Real Decreto Ley

Soraya del Real Decreto Ley
Soraya del Real Decreto Leylarazon

Sucedió en un entierro. Cuando se bajaba al muerto, metido en su cajita, al hoyo, uno de los acompañantes no pudo por menos que exclamar la siguiente sentencia: «es que no somos nadie». Acto seguido, otra persona que se encontraba a su lado, bien trajeada y con aire suficiente, le contestó: «eso lo será usted, yo soy abogado del Estado». El Gobierno está tomado por este Cuerpo, tanto en el nivel ministerial, comenzando por la propia «vice» Soraya Sáenz de Santamaría, como en los segundos escalones. Basta con repasar la Comisión de secretarios de Estado y subsecretarios para ver la cantidad de miembros de este cuerpo de élite que son miembros de ella. Y han cogido el mal gusto de gobernar por Real Decreto Ley. Raro es el viernes que no nos sorprenden con uno o dos. No hay que remontarse muy lejos para tener la última prueba: fue el pasado viernes, en la reunión del Consejo de Ministros, presidida por Soraya del Real Decreto Ley, ya que Rajoy estaba en Bruselas, cuando se despacharon con otro más sobre prejubilaciones y periodos de cotización a efectos del cálculo de las pensiones. Como hombres y mujeres de leyes que son deberían saber que lo del Real Decreto Ley es un instrumento de carácter extraordinario, que sólo se debe emplear en contadas ocasiones. Parece que han olvidado que las leyes y su tramitación en las Cortes elegidas por los ciudadanos tienen que ser lo normal y no lo raro, como sucede ahora. Soraya y sus compañeros de Gobierno y de cuerpo se están pasando un poco. Eso, por no hablar del ministro que anda suelto por ahí y que parece haber perdido la razón. Una pista: no es abogado del Estado.