Ministerio del Interior

La amenaza existe; hay que actuar en consecuencia

La Razón
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El juez Santiago Pedraz envió ayer a prisión a los dos presuntos yihadistas detenidos el pasado miércoles en Madrid. Ambos consiguieron un fusil kalashnikov con el que realizaron vídeos amenazantes con la parafernalia propia del Daesh y contactaron con un vendedor o vendedores para adquirir armas largas y cortas y granadas de mano. Con este panorama, más las decenas de arrestos de personas radicalizadas en nuestro país en el último año, sólo se puede concluir que la amenaza sobre nuestro país es real y cercana. Relativizarla o infravalorarla sería un gran error que, muy probablemente, costaría caro. El Gobierno no lo ha hecho, los principales grupos políticos del país tampoco, y la sociedad lo tiene más que asumido. Por eso nos parece del todo punto sensato y necesario que las medidas de seguridad se hayan reforzado en unas fechas proclives a las aglomeraciones de personas, con la instalación de grandes maceteros en calles céntricas de la capital, la prohibición de que los camiones circulen por zonas sensibles de Madrid y el cierre de accesos y estaciones de Metro en horas de días claves y el aumento de los controles, así como del despliegue policial. Las autoridades hacen lo que deben y los ciudadanos tiene el deber de colaborar y entender las molestias. La alternativa sería dar bazas a los terroristas y eso no podemos consentirlo si pretendemos hacerles frente con garantías.