Desarme de ETA

La derrota total de ETA como exigencia moral

Hoy se cumplen tres años desde el anuncio del cese definitivo de la violencia de ETA. Un periodo de luces y sombras, marcado por la derrota policial de la banda, pero también por no haber logrado su desaparición ni la entrega de las armas. La legalización de sus estructuras políticas y su control de instituciones son motivos para el desasosiego. Ahora, conocemos también que hay un colectivo disidente que apela a «modos de lucha severos». Todo ello demuestra que la democracia no puede parar hasta la derrota total de ETA.