V de viernes

Jaque al plomo, peligroso veneno acumulativo

Con gran retraso, EE.UU decreta sustituir todas las tuberías plúmbeasu del país de manera urgente en el horizonte de una década

Una de las contaminaciones más peligrosas que hay es la producida por la acumulación de plomo y metales. Tengo un conocido que empezó a tener problemas de todo tipo, desde neuralgias a arritmias, temblores, hipertensión, adelgazamiento extremo, dolores musculares, pérdida de dientes y masa ósea. Tras un viacrucis de analíticas, cuando estaba convencido de que le había invadido un cáncer, a un médico se le ocurrió hacerle una prueba de metales, con el resultado de que tenía una intoxicación brutal de plomo, probablemente debido a que trabajó en una empresa de soldaduras metálicas. Pero no hace falta haber sido soldador o tener uno negocio de soldadura para estar hasta arriba de plomo. En Estados Unidos se envenenaron miles de personas en Flint, un barrio obrero en el que las tuberías hicieron estragos en la población con abundancia de lesiones en la piel, caída del cabello, convulsiones, pérdida de visión, de memoria, episodios de depresión, estrés, ansiedad, etcétera. Obama se vio obligado a declarar el estado de emergencia y a decretar el cambio de todas las tuberías de plomo del país, que inexplicablemente aún siguen en uso en muchos distritos. En España se prohibió edificar con ellas en 1980 y desde 2002 la ley obliga a retirar las preexistentes. Sólo que es algo que no se ha hecho siempre. Por fortuna ya en su día se eliminó la gasolina con plomo, que era el principal foco de contaminación, pero aún hay pinturas que lo contienen, así como ciertas cerámicas vidriadas y fuentes industriales.

El plomo es un veneno acumulativo. En dosis pequeñas puede producir síntomas similares a la gripe. Al principio pasan casi inadvertidos porque se relacionan con otras patologías. Pero aún en niveles bajos afecta a la inteligencia, la capacidad de concentración, la coordinación motora y el lenguaje. Su acumulación daña riñones, hígado, corazón y el sistema nervioso. Y provoca situaciones de parálisis, ceguera, desórdenes mentales, esclerosis múltiple o locura. Por eso es considerado el peor elemento contaminante después de la radiación. El problema es que está bastante extendido en el medio ambiente de algunas ciudades, con el resultado de que es frecuente encontrar a personas que albergan en su cuerpo más plomo del que es compatible con la salud. Afecta de manera especial a los niños, pues absorben mucha más cantidad de esta sustancia que los adultos. Detrás de algunos problemas de adaptación escolar hay a veces un problema de intoxicación plúmbea, que amen de fijarse en los tejidos esqueléticos impide la producción de glóbulos rojos. Muchos dolores y ataques articulares diagnosticados como poliartritis reumatoide son debidos al plomo. Se ha llegado a caer en el error de diagnosticar de esquizofrenia a quien en realidad sólo sufría un envenenamiento plúmbeo. Hasta se especuló con que las enfermedades Goya y Van Gogh fueron el resultado de usar durante años pinturas con plomo.

Todos deberíamos hacernos análisis de metales, pero casi nadie se los hace ni los médicos los prescriben.