Luchadoras

Cuenta la mitología nórdica que las valkirias eran las entidades femeninas menores que servían al Dios Odin para elegir a los más heroicos y llevarlos al «Valhala» para convertirlos en los guerreros de lo que ellos consideran el paraíso. No hay que remontarse tantos años atrás ni irse tan lejos para revivir esta época. En estos momentos existen unas heroínas de estas características que se las puede ver surcar las aguas del río Pisuerga demostrando su empeño y lucha.

Se trata de las «Vallkirias Pisuerga», una Asociación de mujeres que padecen o han padecido cáncer de mama, que a través del «Dragon Boat», una modalidad de piragüismo de origen asiático con más de 2000 años de antigüedad extendido por todo el mundo, contando actualmente con más de 50 millones de palistas, impulsan un proyecto inclusivo e integrador, que trata de dar visibilidad al cáncer, a través del beneficioso ejercicio físico que las permite prevenir y mejorar el lindefema que sufren o han sufrido.

Estas heroínas el pasado fin de semana lograron la medalla de oro y plata en el Campeonato de España, lo que demuestra su destreza y buen hacer al frente de una embarcación. Pero esto no es lo más importante, que también, ya que no todo el mundo se levanta con un título de España debajo del brazo, por lo que realmente destacan es por la labor de superación que llevan a cabo día tras día para hacer frente al «bicho» y ser un auténtico ejemplo de lucha y superación para todas las mujeres de España y del mundo.

Esta grandeza la ha sabido ver, con mucho acierto, el Ayuntamiento de Valladolid, liderado por el alcalde Jesús Julio Carnero, ya que la labor social que lleva a cabo esta asociación las ha permitido ser elegidas para recibir uno de los honores más importantes que puede tener un vallisoletano, ser pregoneros de las Fiestas de la Virgen de San Lorenzo.

Por eso el próximo 30 de agosto saldrán al balcón de la Casa Consistorial para dar el pistoletazo de salida a los festejos patronales ante miles de paisanos, y demostrar al mundo que con lucha, esfuerzo, dedicación, trabajo y ganas de querer curarse, se puede hacer frente a esta lacra del cáncer, y vivir con felicidad durante muchos años.