Y volvieron cantando

El Rubicón gallego

Es el BNG de Ana Pontón el que supone la verdadera amenaza para la continuidad de Alfonso Rueda al frente de otro gobierno del PP en la Xunta

Pues sí, también este 2024 que empezamos a enfilar va a ser testigo de otra distorsión en la dinámica política doméstica motivada por la perspectiva electoral que arrancará dentro de poco más de un mes en Galicia, con recorrido sin descanso ni pausa en el País Vasco y sobre todo en la gran «macro encuesta» que supondrá la cita con las urnas en los comicios europeos.

Pero son con mucha diferencia los comicios gallegos los que se perfilan como un verdadero y auténtico paso del Rubicón, no sólo para testar la resistencia de filamentos en una izquierda sumida en la peligrosa apuesta de la amnistía ya castigada por la demoscopia fuera de Cataluña, sino para consolidar y reafirmar el papel de Núñez Feijóo como alternativa sólida desde la oposición al Gobierno de Sánchez y sus socios. Las elecciones en Galicia vienen a brindar al sanchismo, siempre enfrascado en echar antes que nadie cuentas electorales, toda una oportunidad de ganar mucho sin tener demasiado que perder, máxime en una región donde el PP lleva años instalado en el poder y en contraste con el altísimo riesgo que para los populares ofrece la convocatoria del «18-F» donde todo lo que no sea confirmar la mayoría absoluta que vaticinan los sondeos sería una explosión de supernova.

Tal vez por ello desde el día después de la festividad de Reyes, lo que se iniciará es una precampaña electoral a cara de perro en la que el muro levantado por Sánchez en su investidura verá ladrillo reforzado, con numerosas presencias del líder socialista en tierras gallegas obligadas además por el escaso fuelle y recorrido de su candidato Gómez Besteiro.

También Yolanda Díaz tendrá que regresar a una tierra que en las últimas elecciones incluso le negó la consecución de escaño. La candidata por accidente de Sumar, Marta Lois, camina hacia un más que probable paredón político que puede suponer el primer gran golpe de Pablo Iglesias en su venganza contra la vicepresidenta del Gobierno. Pero es el BNG de Ana Pontón el que supone la verdadera amenaza para la continuidad de Alfonso Rueda al frente de otro gobierno del PP en la Xunta. El bloque nacionalista sí parece haber dado con la tecla de un argumentario atractivo y una candidata sólida y esa es la auténtica preocupación para quienes pretenden evitar que Galicia se sume al elenco de separatismos periféricos gobernantes. Mucho en juego.