Libros

Libros

¡Me estoy estresando!

La Razón
La RazónLa Razón

Si todavía algún despistado duda del poder y la eficacia de la creatividad, puede tomarse unas lonchas de pavofrío mientras comprueba cómo su nueva campaña supera el millón y medio de reproducciones en YouTube en apenas tres días, al tiempo que infinidad de mujeres comparten el vídeo por Facebook, Twitter o Wassap.

El singular restaurante «Deliciosa calma» y su propuesta de «recetas libres de estrés» se dirige a la mujer de forma directa con un mensaje feminista apenas minimizado por el humor: «Hoy no llego a recoger a los niños al cole, ya está su padre para hacerlo, digo yo» ; «No le echo la cena a la niña, pero seguro que no le va a pasar nada si se la hace su padre», junto a las alergias e intolerancias «a la presión social». Mientras, Carmen Maura, Rosi de Palma y María Barranco piden el plato «estamos al borde de un ataque de risa con reducción nervios». La marca, que asegura estar «alimentando otro modelo de mujer», recuerda que «Somos quince millones de mujeres. Una sociedad equilibrada también ayuda a reducir el estrés».

En las redes sociales, los mayoritarios comentarios positivos al anuncio por parte de las mujeres contrastan con el enfado, críticas y hasta insultos de algunos hombres, que quedan en evidencia al sentirse atacados y ofendidos por un mensaje que afecta a toda la sociedad, aunque sean las mujeres sus destinatarias y utilice el humor para hacerlo más «digerible».

Por supuesto, pocas mujeres pensarán que reducirán su estrés si comen el embutido anunciado, como tampoco muchos creerán que serán más felices si beben una marca de gaseosa. Campofrío, de la mano de su agencia McCann, ya ha ganado varios premios Eficacia con campañas reivindicando el sentido del humor y la autoestima de los españoles en los peores momentos de la crisis, con el lema «Que nada nos quite nuestra manera de disfrutar de la vida», y en las que las referencias al producto son mínimas. La complicidad que busca ahora con las mujeres reivindicando el derecho a una sociedad más justa e igualitaria, a tener una vida menos estresada y más divertida, alejada de los ataques de nervios, es un objetivo elogiable cuyos efectos positivos no se limitan ni mucho menos a la marca. Pues son campañas que, al tiempo que venden una marca y un producto, van sembrando mensajes que pueden influir y contribuir a tener cada día una sociedad mejor para todos.