El adiós popular de Benedicto XVI, en la Plaza de San Pedro

Aunque lo habitual es que la audiencia vaticana de los miércoles tenga lugar en el aula Pablo VI, y más en pleno invierno, la del próximo día 27 será algo diferente. La última de Benedicto XVI como Pontífice. Por eso, como ayer confirmó el portavoz de la Santa Sede, Federico Lombardi, tendrá lugar en la Plaza de San Pedro en torno a las 11:30 de la mañana. El jesuita aseguró que no tendrá «ninguna particularidad», si bien se espera una multitud de fieles. Un día después, el de su renuncia formal, se reunirá en la Sala Clemente con todos los cardenales que se encuentren en Roma en esa fecha para asistir al cónclave que elegirá a su sucesor en la silla de San Pedro. Tras su salida del Vaticano a bordo de un helicóptero hacia las cinco de la tarde, el Papa Benedicto XVI se trasladará a Castel Gandolfo, donde dirigirá unas palabras a los residentes de la pequeña localidad. Lombardi también abordó la polémica suscitada por el diario italiano «La Repubblica», que habla de un informe completo de la investigación sobre la fuga de documentos robados. El portavoz confirmó que la comisión de cardenales encargada de elaborar ese informe sobre la Santa Sede ha efectuado un trabajo cuyos resultados conoce exclusivamente el Papa. «Dichos cardenales no hablarán de este asunto», subrayó.

EL CÓNCLAVE, CON UNO MENOS

Tras la renuncia del cardenal Julius Riyadi Darmaatmadja, arzobispo emérito de Yakarta, serán 116 los cardenales que participarán en el cónclave que elegirá al próximo Papa. La agencia Asianews, encargada de recoger las noticias sobre el mundo católico en este continente, confirmó que, «de manera libre y personal», el cardenal decidió no viajar a Roma debido al «deterioro de sus condiciones físicas».