Santoral

¿Qué santo se celebra hoy, 29 de noviembre? Todo lo que debes saber del santoral de hoy

Cada día del calendario litúrgico está firmemente vinculado a uno o varios santos, quienes son recordados con convicción por los fieles

San Saturnino de Tolosa
San Saturnino de TolosaDominio Público

El santoral católico es una recopilación de santos y beatos que la Iglesia católica honra oficialmente durante distintos días del año. Cada día del calendario litúrgico está asociado a uno o varios santos, quienes se recuerdan en las misas y oraciones de los creyentes. Esta tradición de celebrar la vida de los santos se originó en los primeros siglos del cristianismo, cuando se comenzó a venerar a los mártires y otros personajes ejemplares por su vida y su demostración de fe.

Hoy, 29 de noviembre, recordamos a varios santos que han marcado la historia de la cristiandad. Entre ellos se encuentran San Álvaro Pelagio, San Brandán, San Demetrio, San Filomeno, Santa Iluminada, San Jacobo obispo, San Paramón, San Radbodo, San Saturnino de Cartago, Beato Alfredo Simón Colomina, Beato Dionisio de la Natividad (Pedro Berthelot), Beato Eduardo Burden, Beato Federico de Ratisbona, Beato Guillermo Gigson, Beato Guillermo Knight, Beato Jorge Errington, Guillermo Gigson y Guillermo Knight, presbíteros y mártires y Beato Redento de la Cruz.

Desde el periódico LA RAZÓN destacamos a San Saturnino de Tolosa.

¿Quién fue San Saturnino?

Se sabe poco sobre la vida y el apostolado de San Saturnino, el primer Arzobispo de Tolosa. Lo que sí está claro son los eventos que llevaron a su muerte y el valiente acto de martirio que la provocó. En el año 250, los edictos de Decio se llevaron a cabo en Galia, forzando a todos los cristianos a realizar un acto público de idolatría.

Durante esta dura persecución, los sacerdotes paganos de Tolosa culparon a Saturnino por el silencio de sus ídolos, que dejaron de dar oráculos. Una vez, estos sacerdotes instigaron a la multitud contra el obispo mientras pasaba por el templo de Júpiter Capitolino, intentando obligarlo a realizar sacrificios a los dioses. Ante la negativa de Saturnino, los paganos, irritados, decidieron no esperar a un juicio formal.

Con la aprobación tácita de los magistrados, la multitud tomó a Saturnino, lo ató a un toro destinado a ser sacrificado, y el animal, desbocado, huyó. Saturnino, con la cabeza rota y el cuerpo desgarrado, murió a manos de la multitud. Las dos mujeres que tuvieron la valentía de recoger el cuerpo de San Saturnino y enterrarlo también fueron martirizadas. La liturgia de la diócesis de Tolosa las ha honrado con el nombre de las "Santas Doncellas".