Santoral

¿Qué santo se celebra hoy, 31 de mayo? Lo que debes saber del santoral de la Iglesia Católica

Hoy los cristianos conmemoramos la Visitación de María a Santa Isabel y a Santa Petronila de Roma hija de Simón Pedro uno de los doce apóstoles de Jesús

Visitación de María a su prima Isabel
Visitación de María a su prima Isabelsuyapamedios.hnsuyapamedios.hn

El santoral, también conocido como calendario litúrgico, es un libro religioso que contiene la lista de los santos reconocidos por la Iglesia Católica y que se celebra cada día del año. Más allá de una simple lista de nombres, representa un viaje fascinante a través de la fe, la historia y la cultura cristiana.

¿Qué santos se celebran hoy viernes 31 de mayo?

  • Santa Petronila de Roma
  • San Félix de Nicosia
  • San Hermias de Comana
  • San Noé Mawaggali
  • San Silvio de Toulouse
  • Beata Bautista Varano
  • Beato Jacobo Salomoni
  • Beato Mariano de Roccacasale
  • Beato Nicolás Barré
  • Visitación de Nuestra Señora a Santa Isabel

Santa Petronila de Roma: un faro de fe y caridad en la Roma del siglo IV

Santa Petronila de Roma
Santa Petronila de RomaDominio PúblicoDominio Público

En la Roma del siglo IV, una joven llamada Petronila se alzó como un faro de fe y caridad, iluminando la vida de los más necesitados con su bondad y su ejemplo. Hija de San Pedro Apóstol, Petronila dedicó su vida a seguir los pasos de su padre, difundiendo la palabra de Dios y brindando ayuda a los más vulnerables.

Una infancia marcada por la fe

Nacida en Antioquía, Petronila creció en el seno de una familia cristiana. Su padre, Simón Pedro, uno de los doce apóstoles de Jesús, le inculcó desde temprana edad los valores de la fe, la caridad y el amor al prójimo. Desde pequeña, Petronila acompañó a su padre en sus viajes misioneros, presenciando de cerca su entrega a la predicación del Evangelio y su compromiso con los más desfavorecidos.

Siguiendo los pasos de su padre

Tras la muerte de San Pedro, su hija se trasladó a Roma, donde continuó difundiendo la fe cristiana y dedicando su vida al servicio de los demás. Conocida por su bondad y su compasión, Petronila se convirtió en un referente para la comunidad cristiana de Roma, brindando apoyo y consuelo a los enfermos, los pobres y los marginados.

Un ejemplo de fe y caridad

La vida de esta santa estuvo marcada por su profunda fe y su inquebrantable compromiso con la caridad. Su dedicación a los más necesitados la convirtió en un símbolo de esperanza y amor para la comunidad cristiana de Roma. Su ejemplo nos invita a seguir los pasos de Jesús, dedicando nuestra vida al servicio del prójimo y a la construcción de un mundo más justo y compasivo.

La Visitación de Nuestra Señora a Santa Isabel: un encuentro de fe y alegría

Visitación de María a su prima Isabel
Visitación de María a su prima Isabelsuyapamedios.hnsuyapamedios.hn

El relato evangélico de la Visitación de Nuestra Señora a Santa Isabel nos ofrece una hermosa escena de fe, alegría y hermandad entre dos mujeres excepcionales: la Virgen María y su prima Isabel. Este encuentro, cargado de simbolismo y significado, ha inspirado a artistas, escritores y fieles durante siglos. Conozcamos en profundidad la historia de la Visitación y su relevancia en la tradición cristiana.

Un encuentro inesperado

En el Evangelio de Lucas (1:39-56), se narra cómo la Virgen María, embarazada del Niño Jesús, se dirigió a la región montañosa de Judea para visitar a su prima Isabel, quien también esperaba un hijo, Juan el Bautista. Este encuentro no fue una simple visita familiar, sino un acontecimiento lleno de gracia divina y significado profético.

El saludo de las madres

Al llegar a la casa de Isabel, María la saludó con alegría, y en ese mismo instante, el niño que Isabel llevaba en su vientre saltó de gozo. Isabel, llena del Espíritu Santo, exclamó: "¡Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre!". María, a su vez, respondió con un hermoso cántico de alabanza a Dios, conocido como el Magnificat.

Un encuentro de fe y esperanza

El encuentro entre María e Isabel no solo fue un momento de alegría personal, sino también una manifestación del plan de Dios para la salvación de la humanidad. La presencia del Niño Jesús en el vientre de María y la profecía de Juan el Bautista anunciaban la llegada del Mesías, el Salvador esperado por el pueblo de Israel.

Un símbolo de la Iglesia

La Visitación también ha sido interpretada como un símbolo de la Iglesia, una comunidad de creyentes unidos por la fe y el amor. María e Isabel representan a las madres de la Iglesia, quienes acogen en su seno la palabra de Dios y la transmiten a las nuevas generaciones.