Coronavirus

El Gobierno teme que el virus rebrote en otoño tras atenuarse este verano con el calor

Expone en el Plan de Estabilidad su confianza en que la mayor cantidad de luz reduzca los contagios, pero teme que aumenten luego con las bajas temperaturas

Valencia durante el estado de alerta por coronavirus
Valencia durante el estado de alerta por coronavirus©Gonzalo Pérez MataLa Razón.

El Gobierno no cree que la remisión de ingresos de pacientes por Covid 19 en los hospitales vaya a ser definitiva. Espera, eso sí, que las infecciones bajen a medida que aumente el calor, pero cree que podrían subir una vez que remita y empiece a hacer más frío. En la actualización del Programa de Estabilidad de 2020 del Reino de España que acaba de enviar a Bruselas, el Ejecutivo alude a la importancia de la meteorología como supuesto exógeno del escenario macroeconómico que se avecina.

Según expone en el documento, “se desconocen todavía con precisión cuáles son exactamente las circunstancias que facilitan en mayor medida la transmisión del virus Covid 19. Esta situación alimenta la incertidumbre y, sin duda, dificulta el establecimiento de marcos y protocolos sólidos que impulsen la actividad económica”.

En el texto subraya que “desde una perspectiva optimista, es posible que en los próximos meses se cuente ya con un número elevado de personas inmunizadas y que las temperaturas más altas y la mayor cantidad de luz solar reduzcan la probabilidad de contagio”. A su juicio, esta situación permitiría alcanzar una situación muy cercana a la normalidad y si, además, la enfermedad está controlada en otros países, la circulación internacional de personas se podría restablecer. El Gobierno añade, sin embargo, que desde una perspectiva más pesimista “no se descartan posibles nuevos brotes, particularmente a partir del otoño, a medida que bajen las temperaturas".

Tal y como avanzó LA RAZÓN el pasado 6 de abril, los altos cargos del Ministerio de Sanidad ya mostraban internamente entonces su preocupación por posibles mutaciones del virus que dificultaran la elaboración de una vacuna y daban por hecho que a la vuelta del verano, con la remisión del calor, la circulación del virus se intensificará, tras quedar previsiblemente atenuado durante los meses estivales. Ésta es, precisamente, una de las razones que esgrime también la Comunidad de Madrid para no clausurar definitivamente el hospital de campaña de Ifema y mantener listas las instalaciones hasta otoño: el temor a que el coronavirus vuelva con intensidad.