Los tres pilares para el buen funcionamiento del sistema inmune

El sistema inmunológico es la defensa natural del cuerpo contra las infecciones. Por medio de una serie de pasos, su cuerpo combate y destruye microorganismos infecciosos invasores antes de que causen daño. Cuando este sistema funciona adecuadamente, le protege de infecciones que le causan enfermedades. Son muchos los factores que influyen en el buen funcionamiento del sistema inmune, pero hay tres claves:

El primer pilar sería tener unos buenos niveles de hierro sérico, en torno a los 100 picogramos/l, y una ferritina en torno a los 60-80 mcg/l. Los macrófagos, que son las primeras células del sistema inmune que llegan al punto de entrada de los microorganismos, necesitan de la presencia de unos niveles adecuados de hierro; es decir, el movimiento de estos macrófagos es hierro-dependiente.

El segundo pilar sería tener unos buenos niveles de vitamina D, en torno a los 40-60 nanogramos/ml. La vitamina D regula lo que se llaman células presentadoras de antígenos, que juegan un papel muy importante en el paso de la información al sistema inmune adaptativo, para elaborar una respuesta contundente frente al microorganismo agresor.

El tercer pilar sería tener una flora intestinal correcta. En el intestino tenemos unas estructuras llamadas placas de Peyer, responsables del 80% de nuestro sistema inmunológico.

Además de cuidar estos tres pilares, hay otros complementos que pueden sernos de utilidad en el mantenimiento del sistema inmunológico:

-Vitamina C: A ser posible nanosomada o liposomada, ya que estas formas químicas son mas eficaces que otros tipos de vitamina C. Es anticatarral, antiviral, antigripal.

-El calostro bobino: es una excelente fuente de sustancias nutritivas para el organismo y el correcto funcionamiento del sistema inmune, gracias a que estimula la función, producción y actividad de las células del sistema inmune.

-Cúrcuma liposomada: la curcumina ha demostrado tener actividad antioxidante, antiinflamatoria, antiviral, antibacteriana, antifúngica, y, por lo tanto, mejora el funcionamiento del sistema inmunológico.

-Equinácea: su uso más frecuente, y por el que es más conocida, es para reducir los síntomas del resfriado común, mejorando el funcionamiento del sistema inmune.

-ZINC: también mejora el funcionamiento del sistema inmune.

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