Salud

«Un rebrote será inevitable, el reto de la tecnología es que sea controlable»

La compañía tecnológica Satec ha desarrollado una plataforma de telemedicina preventiva para luchar contra el coronavirus

Luis Rodríguez-Ovejero, presidente del Grupo Satec
Luis Rodríguez-Ovejero, presidente del Grupo SatecAna Morales

Luis Rodríguez-Ovejero, asturiano, ingeniero de caminos y fundador de Satec, es cordial y cercano. Desde sus inicios como ingeniero en Estados Unidos e Inglaterra y luego como empresario, lleva más de cuatro décadas de pasión por la innovación. Comprometido con el liderazgo social de las empresas, pasó un año en Harvard explorando maneras de ayudar a los sistemas de salud en países en vías de desarrollo.

-¿Cómo puede ayudar la teleasistencia a luchar frente al Covid-19?

-Esta pandemia ha movilizado el esfuerzo de atención médica, que ha sido impresionante. Se han asimilado importantes lecciones que cambiarán muchas cosas, entre ellas, el uso de la teleasistencia como herramienta corriente.

-Han creado un servicio de Prevención y Asistencia a la Salud que denominan PAS. ¿En qué consiste?

-Se trata de una plataforma informática y unos servicios de apoyo que recogen información relevante sobre la situación de las personas de un colectivo ante la amenaza de la pandemia. Con respecto a la salud realizamos una atención y seguimiento general y contamos con una actualización permanente del individuo. En la interacción con el entorno monitorizamos movimientos y cercanía entre las personas de manera que, si se detecta un portador, podremos abordar la trazabilidad e identificar y aislar los focos. Después, la telemedicina nos permite el tratamiento y seguimiento con mucha flexibilidad y seguridad del personal asistencial.

-¿Sería posible evitar un rebrote?

-El repunte del contagio es una hipótesis con la que forzosamente se ha de contar y no hacerlo será una grave irresponsabilidad. Quizás en la dinámica presente ya no sea evitable y, por tanto, nuestros esfuerzos han de ir en la dirección de que sea controlable y gestionable, y eso requiere previsión, lo que implica anticipación. Esta primera oleada de pandemia nos ha sorprendido y no es razonable que lo haga la segunda. Necesitamos conocer la evolución del contagio desde los primeros síntomas y en los primeros focos, y eso es información a captar y procesar para que sea útil, y ahí están nuestro esfuerzo y la tecnología.

-¿Cómo pueden ayudar las empresas a controlar esta pandemia?

-Desde nuestra perspectiva, y conociendo el impacto de la pandemia en la organización, podemos establecer la trazabilidad de cada individuo, lo que permitirá identificar nuevos casos y evitar contagios. También prestando atención médica a los potenciales afectados y así apoyar al sistema de salud, si resultase necesario. La empresa ocupa una gran parte de la población activa cuya parálisis es el principal desencadenante de la crisis económica. Parece natural que sea a la empresa a quien preocupe y ocupe esta situación. Poner al servicio de la atención y prevención la experiencia, disciplina y la tecnología/talento empresarial permitirá que exista un sistema de control del contagio y, en el futuro, de alarma temprana.

-¿Esta herramienta está pensada para todo tipo de empresas, incluida la administración?

-Lo que proponemos es un proceso de transformación digital de la actividad de riesgos laborales y esto se aplicaría a cualquier colectivo que tenga personas trabajando. Se habrán de vertebrar, en primer lugar, los medios de registro, atención y seguimiento que permitan conocer, en tiempo real, la situación sanitaria de cada colectivo. Es clave un registro detallado y se ha de comprender que son las personas los portadores de la información, que han de participar activamente.

-¿Los españoles están preparados para usar estas herramientas tecnológicas o todavía hay recelo?

-Estamos hablando de utilización de la tecnología en la resolución de un problema y España es un país avanzado en la transformación digital.

-¿La tecnología se está infrautilizando en esta pandemia?

-Esta crisis ha revelado un problema: una carencia estructural muy grave en nuestro sistema de prevención de riesgos y es ahora, a posteriori, cuando hemos de resolverla y para eso está la tecnología disponible. Nuestra plataforma comprende una diversidad de disciplinas tecnológicas, desde modelos de datos, seguridad de la información, teleasistencia, geolocalización, herramientas analíticas, etc. Pero también varios problemas a resolver, como la atención remota, el control del contagio o la alarma temprana…