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Moncloa pedía “distancia social” 11 días antes de permitir el 8-M

Presidencia alertaba el 26 de febrero de que «cuando alguien con una enfermedad respiratoria tose, proyecta pequeñas gotículas que contienen el virus»

Documento del 26 de febrero de Moncloa con medidas de protección básicas contra el nuevo coronavirus, entre las que estaba mantener la medida de distancia de al menos un metro entre las personas.
Documento del 26 de febrero de Moncloa con medidas de protección básicas contra el nuevo coronavirus, entre las que estaba mantener la medida de distancia de al menos un metro entre las personas.Presidencia del GobiernoMoncloa

El Gobierno español era plenamente consciente en febrero de la peligrosidad del nuevo coronavirus y de su enorme capacidad de transmisión de persona a persona. El miércoles 26 de dicho mes la Secretaría General de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) ponía en conocimiento de los máximos responsables universitarios de nuestro país una nota emitida por el llamado Sistema Operativo Sanitario, dependiente de Presidencia del Gobierno, que le había trasladado la Secretaría de Estado de Universidades. Dicha nota contenía las recomendaciones que había formulado entonces la Organización Mundial de la Salud (OMS) en relación con el brote de enfermedad por Coronavirus (Covid-19). El documento, al que ha tenido acceso LA RAZÓN, propone medidas de protección básicas contra la nueva patología y, entre ellas, hay una fundamental, titulada: «Mantenga el distanciamiento social».

Justo 11 días antes de que se celebraran las manifestaciones feministas del 8 de marzo con la autorización del Ministerio de Sanidad, la propia Presidencia del Gobierno consignaba en el texto la siguiente recomendación: «Mantenga al menos 1 metro de distancia entre usted y las demás personas, particularmente aquellas que tosan, estornuden y tengan fiebre. ¿Por qué? Cuando alguien con una enfermedad respiratoria, como la infección por el 2019-nCoV, tose o estornuda, proyecta pequeñas gotículas que contienen el virus. Si está demasiado cerca, puede inhalar el virus».

En los puntos anteriores del documento, Presidencia del Gobierno aconsejaba lavarse «las manos con frecuencia con un desinfectante de manos a base de alcohol o con agua y jabón». ¿Por qué?, se preguntaba. Porque «lavarse las manos con un desinfectante a base de alcohol o con agua y jabón mata el virus si éste está en sus manos». Añadía, además, que «al toser o estornudar, cúbrase la boca y la nariz con el codo flexionado o con un pañuelo; tire el pañuelo inmediatamente y lávese las manos con un desinfectante de manos a base de alcohol, o con agua y jabón. ¿Por qué? Al cubrir la boca y la nariz durante la tos o el estornudo se evita la propagación de gérmenes y virus. Si usted estornuda o tose cubriéndose con las manos puede contaminar los objetos o las personas a los que toque». Asimismo, también pedía evitar tocarse los ojos, la nariz y la boca: «Las manos tocan muchas superficies que pueden estar contaminadas con el virus. Si se toca los ojos, la nariz o la boca con las manos contaminadas, puedes transferir el virus de la superficie a sí mismo».

Documento del 26 de febrero de Moncloa con medidas de protección básicas contra el nuevo coronavirus, entre las que estaba mantener la medida de distancia de al menos un metro entre las personas.
Documento del 26 de febrero de Moncloa con medidas de protección básicas contra el nuevo coronavirus, entre las que estaba mantener la medida de distancia de al menos un metro entre las personas.Presidencia del GobiernoMoncloa

Además de poner de manifiesto la peligrosidad de no mantener distancias de seguridad entre las personas y de no adoptar medidas de higiene, el Sistema Operativo Sanitario de la Secretaría General de Presidencia del Gobierno admitía incluso implícitamente en su comunicado la posibilidad de desarrollar síntomas como fiebre, tos y dificultad para respirar sin haber viajado a una zona en la que se hubiera notificado entonces la presencia del 2019-nCoV.

En su quinta recomendación subrayaba: «Siempre que tenga fiebre, tos y dificultad para respirar es importante que busque atención médica de inmediato, ya que dichos síntomas pueden deberse a una infección respiratoria o a otra afección grave. Los síntomas respiratorios con fiebre pueden tener diversas causas, y dependiendo de sus antecedentes de viaje y circunstancias personales, el 2019-nCoV podría ser una de ellas». En este apartado aconsejaba indicar al prestador de atención de salud si se había viajado a una zona en la que se hubiera notificado la presencia del virus o tenido contacto cercano con alguien que hubiera viajado desde alguno de esos lugares y presentara síntomas respiratorios.

En la recomendación sexta, Presidencia del Gobierno subrayaba que «si tiene síntomas respiratorios leves y no tiene antecedentes de viajes a lugares con casos notificados del 2019-nCoV, practique cuidadosamente una higiene respiratoria y de manos básica y quédese en casa hasta que se recupere, si es posible».

Como informó el pasado sábado LA RAZÓN, el Ministerio de Sanidad sabía al menos siete días antes del 8-M que en España ya había casos de infección comunitaria no importados de China, Italia u otro estado asiático o europeo. En un informe elaborado el 1 de marzo, Seguridad Nacional, dependiente de Presidencia del Gobierno, subrayaba que el 90% de los casos identificados hasta entonces «son importados o relacionados con casos importados», dando así a entender, aunque sin mencionarlo de forma explícita, que el 10% restante se correspondía con infecciones locales provocadas por un virus que ya circulaba entonces en nuestro país.

El comunicado enviado a los rectores españoles también aludía a las mascarillas, envueltas en la polémica desde el estallido de la pandemia. Como se recordará, el Ministerio de Sanidad ha pasado de desaconsejar su uso por parte de personas sanas a establecer su obligatoriedad, llegando incluso a plantearse multar con hasta 100 euros a quien no las lleve cuando finalice el estado de alarma y se instaure lo que en lenguaje orweliano denomina «la nueva normalidad». La nota de Presidencia del Gobierno del mes de febrero establece que «si está usted sano, sólo necesita llevar mascarilla si atiende a alguien en quien se sospeche la infección por el 2019-nCov». Sin embargo, a renglón seguido establecía una puntualización: «Lleve también mascarilla si tiene tos o estornudos. Las mascarillas sólo son eficaces si se combinan con el lavado frecuente de manos con una solución hidroalcohólica o con agua y jabón. Si necesita llevar una mascarilla, aprenda a usarla y eliminarla correctamente».

La nota de presidencia incluía recomendaciones llamativas con respecto a la alimentación. Pedía, por ejemplo, manipular la carne cruda, la leche y los órganos de animales «con cuidado», a fin de evitar «la contaminación cruzada con alimentos crudos, con arreglo a las buenas prácticas sobre inocuidad de los alimentos». También demandaba adoptar medidas generales de higiene, «como precaución general», al visitar mercados de animales vivos, mercados de productos frescos o mercados de productos animales».