Covid-19

El mejor homenaje para ellos

Último día de aplausos sanitarios Covid 19
Un vecinos que viven enfrente del hospital vizcaíno de Cruces colocaron durante el confinamiento una pancarta en la que agradecen a los sanitarios su dedicaciónLuis TejidoAgencia EFE

Hoy el doctor Domingo Pérez León, quien habitualmente comparte en estas líneas su conocimiento sobre diversos asuntos que afectan a nuestra salud, nos ha cedido el testigo para, en su nombre y en el de laboratorio mundonatural, sumarnos al reconocimiento que brinda a todos los servicios esenciales (fuerzas de seguridad, sanitarios, reponedores, empleados en tiendas de alimentación, farmacias, etc.) que en los días más difíciles del confinamiento hicieron posible que tuviéramos acceso a los servicios básicos, así como atención a las personas afectadas por el coronavirus.

Un merecido reconocimiento que llega en un punto en el camino que aún no alcanzamos a situar con la suficiente perspectiva en la lucha contra el Covid-19, pues no sabemos si ya hemos pasado lo peor (ojalá así sea), si deberemos atravesar una segunda oleada más o menos virulenta que la anterior (en la que los hoy homenajeados tendrán que volver a hacer un sobreesfuerzo), o si estamos cerca de conseguir tratamientos efectivos, así como la ansiada vacuna.

Es cierto que mientras avanzamos disponemos de información constante que nos ayuda a contextualizar el paso de esta terrible epidemia por el planeta, si bien también lo es que hay tantas noticias, procedentes de tantas fuentes y con tantos intereses cruzados, que resulta imposible situar a todas ellas en una misma sucesión de hechos, al menos si queremos que el relato resultante tenga sentido y coherencia.

Pero más allá de aplaudir e informarnos, como ciudadanos tenemos una labor clave que desempeñar en esta lucha, una labor para la que se nos pide una actitud activa y vigilante. Es decir, que usemos mascarillas, respetemos el distanciamiento social, nos lavemos las manos, nos cubramos al toser y nos quedemos en casa si nos encontramos mal. Con sólo respetar estas cinco normas, además de homenajear a quienes se entregan mientras la mayor parte de nosotros nos refugiamos en casa, estaremos contribuyendo a aliviar su trabajo en un posible futuro y, consecuentemente a salvar vidas, empezando por la nuestra. Así que ya sabe: si su equipo gana la liga o sube a primera, si la noche de Magaluf o de su barrio le confunden, o piensa en contraprogramar las fiestas que su localidad ha suspendido, respire hondo y sea responsable. Dedíquele ese sacrificio a quienes en los peores momentos se dedican a cuidarte. Será su mejor homenaje.