Oncología

Menos sesiones y mejor postoperatorio en cáncer de próstata

La protonterapia es una de las técnicas que ofrece mayor precisión

Detalle de la próstata
Detalle de la próstataDREAMSTIMELA RAZON

El cáncer de próstata es el tumor más frecuente en la población masculina. En las últimas décadas se han dado importantes pasos hasta conseguir que la supervivencia a cinco años sea hoy de más del 90% en España. Es decir, que más del 90% de los pacientes vivirán al menos cinco años desde su diagnóstico, siendo una de las supervivencias más elevadas para cualquier tipo de cáncer. Eso se debe al diagnóstico precoz y a los avances científicos. «El tratamiento recomendado depende del estadio de la enfermedad en el momento del diagnóstico pudiendo ir desde una simple vigilancia activa para los casos indolentes y poco agresivos hasta una hormonoterapia con o sin quimioterapia para los casos más avanzados, los metastásicos», explica el Dr. Raymond Miralbell, director médico del Centro de Protonterapia Quirónsalud y del Servicio de Radiooncología del Centro Médico Teknon.

Para aquellos pacientes con enfermedad local en el momento del diagnóstico, «recomendaremos el tratamiento más adaptado a cada caso, que puede ser la vigilancia activa, la extirpación quirúrgica de la próstata o la radioterapia con o sin hormonoterapia», precisa.

Los avances más importantes –prosigue Miralbell– «son las novedosas técnicas quirúrgicas de cirugía robótica por vía laparoscópica que reducen significativamente el tiempo de hospitalización y el sangrado durante la intervención de los pacientes operados; también la radioterapia estereotáxica de alta precisión en pocas sesiones diarias, cinco lo más habitual, en una semana o diez días, que ha reducido significativamente las 40 sesiones diarias en ocho semanas de antaño». De hecho, un estudio internacional reciente, el ONE-SHOT trial, propone una sola sesión de tratamiento con técnicas de tratamiento guiado por la imagen, tipo “GPS”, llamado Calypso, que permite el trazado de la próstata en tiempo real durante cada sesión para ajustar al milímetro la balística de los haces según los movimientos aleatorios de la próstata durante la irradiación. Ello permite administrar una megadosis de irradiación a un pequeño volumen cómo si de una radiocirugía se tratase. En el Centro Médico Teknon de Barcelona disponemos del sistema Calypso desde hace unos meses y contamos adherirnos próximamente a este estudio de dosis única», detalla el Dr. Miralbell.

Tratamiento

Además, desde hace unos meses se está utilizando la protonterapia en España. Una técnica precisa de radioterapia que, según explica el doctor, «utiliza haces de protones para tratar tumores minimizando la irradiación de tejidos sanos».

«La mayor exactitud y precisión del tratamiento con haces de protones aumenta la posibilidad de control local tumoral, en particular en tumores radio-resistentes y/o ubicados a proximidad de órganos sanos radiosensibles que limitan la dosis tolerable. La reducción de la dosis a los tejidos sanos, respecto a técnicas con fotones, puede significar una disminución de los efectos indeseables de los tratamientos de radioterapia y una mejora en la calidad de vida post-tratamiento», precisa el especialista.

Hasta la fecha, la protonterapia no había formado parte del arsenal terapéutico habitual para el tratamiento del cáncer de próstata ya que los tratamientos con rayos X y técnicas de alta precisión han demostrado una gran eficacia con un saldo de toxicidad mínimo. Además, hasta hace poco el número reducido de instalaciones de protonterapia habían obligado a dar prioridad a aquellas indicaciones en las que no había una alternativa equivalente.

«Sin embargo, con el cambio de paradigma se perfila un futuro extremadamente prometedor en el campo del tratamiento curativo, no invasivo, del cáncer de próstata con protones, ya que podremos administrar dosis superiores que con rayos X y con mejor focalización», precisa el director médico del Centro de Protonterapia Quirónsalud, centro en el ya han tratado con esta técnica pacientes con cáncer de próstata que había recidivado en los ganglios después de una cirugía fallida.

«El tratamiento consiste en 20 sesiones diarias con un hipofraccionamiento moderado al tener que irradiar un volumen importante de tejido ganglionar pélvico. Así, reducimos casi la mitad las 37 sesiones diarias habituales de los tratamientos clásicos para casos similares» y al menos de momento los pacientes han tenido «una excelente tolerancia durante el tratamiento. Un seguimiento exhaustivo permitirá evaluar los efectos secundarios y la respuesta a medio-largo plazo en los casos así tratados», concluye el Dr. Miralbell.