Salud
Tomar alimentos contaminados puede provocar cáncer, trastornos neurológicos o artritis
Hoy es el Día Mundial de la Inocuidad de los Alimentos y los veterinarios tienen una labor clave en esta tarea
Comer de manera saludable resulta esencial para estar sanos, pero todavía en algunas ocasiones es necesario recordar la necesidad de cuidar mucho la calidad de los alimentos que ingerimos. Por eso, hoy se celebra el Día Mundial de la Inocuidad de los Alimentos (WFSD, por sus siglas en inglés), que tiene como objetivo llamar la atención e inspirar acciones para ayudar a prevenir, detectar y gestionar los riesgos transmitidos por los alimentos. Y esos riesgos no son inofensivos, ya que “los contaminantes ambientales, las toxinas naturales y los metales pesados se encuentran dentro de las sustancias químicas tóxicas que, tras una larga exposición, pueden llegar a provocar problemas hormonales, trastornos neurológicos o enfermedades como artritis o cáncer, por eso es fundamental certificar que los alimentos y bebidas llegan libres de microorganismos y sustancias químicas tóxicas”, según advierte en un comunicado la Organización Colegial Veterinaria (OCV), en el que subraya que en todas las fases de la cadena alimentaria -desde la producción, transporte y sacrificio hasta la distribución- hay un profesional veterinario para asegurar que los alimentos llegan a los consumidores con todas las garantías sanitarias.
El tema de este año, “Alimentos inocuos ahora para un mañana saludable”, destaca la necesidad de sistemas de producción sostenibles para garantizar la salud de las personas, el planeta y la economía a largo plazo. Y ahí el trabajo de análisis y control que realizan los veterinarios en todos los eslabones de la cadena es decisivo para evitar enfermedades de transmisión alimentaria y garantizar la inocuidad y seguridad de los alimentos y bebidas que llegan a la mesa de los consumidores. “Uno de los principales desafíos de la profesión veterinaria es salvaguardar la salud pública, y la seguridad alimentaria, uno de sus pilares fundamentales”, señalan desde la OCV, ya que “los consumidores están expuestos a riesgos tanto biológicos como químicos a través del consumo de alimentos”, lo que pone de manifiesto la necesidad de contar con profesionales capacitados para reducir o eliminar estas amenazas.
Entre los microorganismos de transmisión alimentaria más comunes y que conllevan un mayor riesgo están las bacterias, como la salmonella, o el campylobacter; los parásitos, como la trichinella; y los virus como la Hepatitis A o los norovirus. Por ello, entre las principales tareas que desarrollan los veterinarios para asegurar la inocuidad de los alimentos destaca la supervisión de los productos en la recepción y almacenamiento; la evaluación del envasado y etiquetado según la normativa; la recopilación, elaboración y envío de muestras al laboratorio para su análisis; la identificación de condiciones insalubres en las instalaciones de comercialización y almacenamiento; y la realización de inspecciones en los establecimientos de comercialización de los alimentos.
✕
Accede a tu cuenta para comentar