Calor

Ocho consejos útiles para combatir el mal olor corporal en verano

Con el verano, tendemos a sudar más y que varias partes de nuestro cuerpo retengan olores poco agradables

El exceso de sol, el sudor o la mala hidratación durante el verano pueden acentuar el envejecimiento del contorno de ojos.
El exceso de sol, el sudor o la mala hidratación durante el verano pueden acentuar el envejecimiento del contorno de ojos.ObjetivoBienestarLa Razon

Con la llegada del verano, el calor genera también muchos problemas. No solo se resume en las altas temperaturas y las olas de calor, que impide poder ir por la calle a ciertas horas del día e incluso dormir por las noches, sino también la sudoración excesiva,de tal modo que esta genere mal olor.

Las glándulas sudoríparas son las encargadas de perder agua por la piel en lo que se conoce como transpiración. Su función es regular el calor corporal mediante la evaporación del sudor, pero también excretar toxinas y restos metabólicos de los procesos del cuerpo.

Algunas personas, incluso, padecen la llamada bromhidrosis, una enfermedad relativamente poco común pero en el que el sudor de las axilas, genitales o pies resulta muy desagradable, merced a determinados compuestos químicos.

Por supuesto, la intensidad del olor dependerá en tal caso de la proporción de grasas secretadas. Se sospecha que es un problema que depende de muchos factores, desde alimenticios hasta por la mala higiene, que en verano debe evitarse a toda costa. Estos son algunos de los consejos para evitar el mal olor en verano

  • Afeitarnos las axilas: la eliminación del vello contribuye a la menor pervivencia bacteriana, además de retener menos los malos olores. Muy útil para cuando estamos en verano, así como para evitar que el mal olor se quede en nuestro cuerpo.
  • Cremas con antibióticos: el uso de este tipo de cremas en lugar de cremas hidratantes es una buena solución. Eso sí, debe estar prescrita por un dermatólogo, que debe valorar el nivel de nuestra bromhidrosis y determinar si es solamente apocrina (solo en axilas, genitales y pies) o también ecrina, lo afectaría a todo el cuerpo.
  • Evitar el ejercicio intenso: en su caso, es conveniente ducharse inmediatamente después hasta bajar la temperatura corporal, así como usar antitranspirantes.
  • Evitar los alimentos promotores del mal olor: la mayoría de estos alimentos, en proporciones normales y en una dieta equilibrada, no tiene por qué dar problemas, pero sí se deben tener en cuenta. Asimismo, un mal olor puede ser síntoma de malos hábitos alimentarios. Algunos de estos alimentos son el ajo o las carnes rojas, así como las comidas procesadas o el pescado.
  • Evitar también las bebidas que aumentan la sudoración: infusiones excitantes, alcohol, lácteos o café ayudan al mal olor. También los refrescos azucarados, ya que tienden a alterar el metabolismo y convertir el resto de los alimentos en grasas, que se excretan parcialmente y aumentan el mal olor.
  • Mantener una higiene dérmica impecable: esto es, ducharnos diariamente, lavarnos cada vez que sudemos en las zonas sensibles y secarnos bien para evitar el crecimiento bacteriano.
  • Usar jabones germicidas: del mismo modo que las cremas, el uso del jabón es una medida a considerar en verano, ya que elimina las bacterias de las zonas sensibles y evitas que estas puedan fermentar el sudor apocrino. Estos tipos de jabones germicidas es una solución que elimina gérmenes, especialmente concentrado para solubilizar grasas y suciedades.
  • Usar ropa bien seca: la humedad de los tejidos puede fomentar el crecimiento bacteriano, mientras que la ropa absorberá el sudor impidiendo que las bacterias lo descompongan.