Sanidad

La farmacia de Madrid alza la voz al unísono ante la falta de diálogo político ante el Proyecto de Ley de Ordenación y Atención Farmacéutica

Los máximos representantes de la profesión hacen un llamamiento urgente al diálogo constructivo en el trámite parlamentario de la nueva ley

El consenso profesional en torno a esta futura ley es mayoritario
El consenso profesional en torno a esta futura ley es mayoritarioGonzalo Pérez MataLa Razón

La nueva ley de farmacia que ultima la Comunidad de Madrid se presenta como una norma muy esperada para la profesión, pero lo cierto es que se está haciendo de rogar más de lo esperado ante la incapacidad de los representantes políticos de alcanzar un acuerdo. Y ante esa situación, los máximos representantes de los profesionales farmacéuticos en sus distintas vertientes de actividad profesional y empresarial se han unido para alzar la voz y hacer un llamamiento a los Grupos Parlamentarios y una urgente invitación al diálogo constructivo en torno al Proyecto de Ley de Ordenación y Atención Farmacéutica de la Comunidad de Madrid en su trámite parlamentario y, a la vez, «mostrar nuestro apoyo firme y claro a dicho proyecto de ley para que sea ratificado definitivamente por el Pleno de la Asamblea de Madrid», han confirmado en una declaración conjunta que se expone a continuación:

«El consenso profesional en torno a esta futura ley, que en algunas ocasiones se ha cuestionado, es mayoritario y creemos además que el sector a través de sus instituciones, asociaciones profesionales o individualmente, han tenido la oportunidad de realizar sus aportaciones para mejorar el texto inicial, siendo conscientes, por otra parte, de que existen puntos donde nos hubiera gustado avanzar o concretarmás, pero en aquellos artículos que han sido muy debatidos y suponen mejora de la prestación estamos profundamente de acuerdo, como es el caso de la atención farmacéutica domiciliaria a pacientes dependientes, evitando que este servicio profesional pueda convertirse en un delivery.

Consideramos, no obstante, que el contenido de la Ley responde en buena parte a necesidades expresadas por los ciudadanos y supone un refuerzo extraordinario del propio Sistema Nacional de Salud, tal y como se ha evidenciado durante la pandemia en nuestro país.

La cruz verde nunca se apagó durante el estado de alarma y contribuyó, en momentos especialmente delicados, a iluminar a esa población débil que precisaba de la accesibilidad a sus tratamientos en hospitales y oficinas de farmacia,y los farmacéuticosestuvieron ahí demostrando la vocación de servicio público puesta a disposición de los ciudadanos. Los profesionalesdetectamos importantes vacíos legalesque pueden representar inseguridad o interpretaciones diversas sobre el papel del farmacéutico con respecto a los servicios que vienen siendo demandados por la población.

El Proyecto de Ley y las correspondientes enmiendas consensuadas en las distintas comparecencias, es integrador, responde a necesidades reales e incorpora ventajas a los ciudadanos. Son los ciudadanos los que demandan accesibilidad al medicamento, consejo y orientación profesional, máxima seguridad, calidad y garantía en la intervención de los profesionales a los colectivos más vulnerables.

En este sentido, mejora las condiciones de acceso y de planificación de las farmacias; actualizae incorpora nuevas funcionesa desarrollar por los profesionales farmacéuticos; moderniza las actividades y funciones de los servicios y establecimientos farmacéuticos (Primaria, Farmacia Hospitalaria y Oficina de Farmacia); permite unos horarios más flexibles, adaptados a las necesidades de los usuarios; reduce la burocracia y avanza en la calidad y seguridad del medicamento, en la cooperación institucional, en las estrategias de salud pública; garantiza y actualiza derechos y obligaciones tanto a los ciudadanos como a los profesionales; afianza la red de oficinas de farmacia y abre nuevas vías de comunicación aplicando las tecnologías de la información.

Sitúaa la farmacia rural en un entorno social, económico y de desarrollo profesional más favorable; evoluciona en las funciones de la farmacia hospitalaria acordes a las necesidades reales que demandan los pacientes, cumpliendo así las expectativas de sus profesionales, y concretael papel del farmacéutico deprimaria en los Centros y en su colaboración con los distintos nivelesasistenciales.

Confiamos, por todo ello, que el trámite de la norma supere cualquier obstáculo partidista para sumarse al interés general y, en consecuencia, priorice la actividad parlamentaria con el fin de cumplir los plazos previstos para su aprobación definitiva dentro de esta legislatura, sin sufrir demoras que impidan este objetivo.

La Profesión farmacéutica precisa de un respaldo normativo constructivo yútil para los ciudadanos. Necesita un marco que brinde ya estabilidad, seguridad y certidumbre para desarrollar, de forma efectiva, la actividad que las normas confieren a los farmacéuticos en los distintos niveles, primaria, hospitalaria y farmacia comunitaria, precisamente para reforzar la colaboración, coordinación y participación de sus profesionales en beneficio de los ciudadanos.

En definitiva, el conjunto de la Profesión farmacéutica, representada en este acto por distintas instituciones: corporativa, sociedad científica, farmacia rural, hospitalaria, primaria y empresarial, QUIEREN mostrar un mensaje de unidad en torno a un proyecto de ley y enmiendas consensuadas que reporta beneficios a los ciudadanos, a los que nos debemos por encima de cualquier interés particular, construyendo un Sistema Regional de Salud fuerte, de la máxima calidad y eficiencia en lo que respecta al servicio profesional del farmacéutico inherente al medicamento, su seguimiento y adherencia.

Apelamos, por ello, a los Grupos parlamentarios de la Asamblea de Madrid a construir un diálogo en positivo que lleve al máximo consenso político y a la aprobación del proyecto de ley, que mejorará, sin duda, la vida de los ciudadanos en general, de los pacientes en