Cáncer

Así funciona la nueva red europea de Oncología liderada por Madrid

La Red Oncológica Madrileña ya es una realidad y capitanea el proyecto europeo que marcará las líneas estratégicas del futuro del cáncer

Red Oncológica Madrileña
Red Oncológica MadrileñaTeresa Gallardo

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cáncer es la principal causa de muerte en el mundo, razón más que contundente para ponerse manos a la obra y diseñar una estrategia global que sea capaz de desdibujar esa negra estadística. La Comunidad de Madrid ha tomado las riendas de este desafío y liderará la nueva European Oncology Network (EON), una iniciativa que marcará las líneas estratégicas del futuro de esta especialidad y que está basada en el proyecto pionero de la Red Oncológica Madrileña (ROM), un nuevo modelo organizativo único en el mundo que se caracteriza por el abordaje integral, completo y unificado del cáncer que asegura la equidad de los pacientes.

Hace tiempo que la Ciencia descubrió que el cáncer no es una sola enfermedad, sino la suma de muchas, motivo por el que la superespecialización en los diferentes tumores se ha convertido en una suerte de obligación tanto para los investigadores como para los profesionales sanitarios, acostumbrados ya a trabajar en equipos multidisciplinares que analizan cada caso desde diferentes prismas, lo que garantiza una atención de excelencia y eficiente.

Ese «modus operandi» multiplica sus ventajas cuando toda esa labor se realiza en red, tal y como impulsa la ROM, coordinada por Javier Hernández en la Oficina del Cáncer, que tiene al frente a Federico Longo. «El paciente está en el centro de todo el proceso, sin importar dónde viva o qué hospital le corresponda geográficamente. El modelo de trabajo en red se basa en una estructura operativa que define cinco polos geográficos y demográficos y 29 nodos (hospitales) que ya no están aislados entre sí, sino que forman parte de un mismo esqueleto que trabaja por un objetivo único, que es el beneficio del afectado, ya que este se derivará allí donde se le pueda ofrecer una mejor atención para su caso particular», explica Jesús García-Foncillas, jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz de Madrid y director del Instituto Oncológico OncoHealth.

De esta manera, «la atención al paciente no se estructura por hospitales, sino basándose en el trabajo común de todos los oncólogos del área, lo que garantiza la equidad de todas las personas. Esto era una tarea pendiente, por lo que creo que va a ser muy bueno para todos, tanto para los pacientes como para los profesionales y para el sistema, ya que además supondrá un ahorro económico y una mayor experiencia encaminada a la especialización», asegura Miguel Martín, jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Gregorio Marañón de Madrid. De hecho, dentro de ese trabajo en red se cuenta con un Comité de Tumores Compartidos entre hospitales y se desarrolla un entorno digital común y un Big Data que facilita el trabajo de los profesionales, «lo que enriquece muchísimo la toma de decisiones, mejorando la excelencia», insiste García-Foncillas.

Red Oncológica Madrileña
Red Oncológica MadrileñaTeresa Gallardo

El potencial de mejora se multiplica aún más ahora que la ROM empieza a cruzar fronteras, «ya que, gracias a la EON vamos a unir esfuerzos con aquellos lugares de Europa en los que también se apueste por este tipo de planteamientos. Sin duda, esto es algo pionero en España, pero también a nivel europeo y diría que mundial, por lo que Madrid puede liderar una nueva forma de hacer Oncología a nivel internacional, acercándonos al desafío de acorralar al cáncer», asegura García-Foncillas. Y «no se trata de una cuestión de patriotismo», tal y como reconoce Martín, sino que «Madrid cuenta con todos los mimbres necesarios para que este proyecto sea extrapolable a otras regiones y países, convirtiéndonos en un modelo a seguir».

Una opinión que también comparte Manuel Hidalgo, jefe de la División de Hematología y Oncología Médica en Weill Cornell Medicine y del NewYork-Presbyterian Hospital, quien desde su visión al otro lado del Atlántico confirma que «la ROM es un proyecto necesario y fascinante que puede convertir a Madrid en el líder mundial de la Oncología. Tenemos todas las herramientas para conseguirlo si se superan las limitaciones económicas, sobre todo inicialmente, y si se apuesta por un cambio de cultura en la que se apoye más la innovación científica y el trabajo en equipo que la individualización. Creo que va por el buen camino y podría marcar un antes y un después en la forma de abordar el cáncer».

Parte de la gran revolución que llega de la mano de la ROM es la apuesta decidida por fomentar la investigación también de forma interconectada a través de la Red Oncológica Madrileña de Investigación Clínica (Romic). «Hasta ahora los grandes ensayos clínicos con nuevos fármacos oncológicos se hacían principalmente en los hospitales más grandes, pero con esto buscamos una fórmula de centros asociados para ampliar las oportunidades y garantizar esa equidad tan decisiva para los pacientes, pero también para los profesionales», explica Martín. La otra gran ventaja añadida es que «así seremos más atractivos para la industria farmacéutica y esto genera grandes beneficios que se traducen en el acceso precoz a los fármacos más innovadores, en la mayor financiación para los centros investigadores y en el ahorro para la gestión», avanza Martín.