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«Cardiva abre una división de Traumatología para cubrir una necesidad real»

Ignacio Vega y Agustín Canales, directivos de la empresa, creen que el sector crecerá a un ritmo del 6% en los próximos años

Agustín Canales e Ignacio Vega
Agustín Canales e Ignacio Vegacardiva

Cardiva, empresa española que comercializa y fabrica una amplia gama de productos médicos a nivel mundial, cierra el año 2022 con la creación de una nueva división, la de Traumatología, que se suma a otras áreas de la compañía, como Neurorradiología y Radiología Intervencionista, Hemodinámica, Cirugía Vascular y Endovascular, Dolor, Neuroestimulación y Equipos y sistemas clínicos. Desde esta nueva unidad de negocio, Cardiva representa primeras marcas de productos que abarcan desde cirugía reconstructiva, osteosíntesis, medicina regenerativa, columna o productos dedicados a las infecciones, así como prótesis tumorales o hechas a medida.

La compañía cuenta con más de 30 años de experiencia en distribución y fabricación nacional y con un conocimiento muy extenso del sistema sanitario. Agustín Canales, director de Traumatología de Cardiva, explica que esta unidad de negocio recién creada “viene a cubrir una necesidad que realmente existe dentro del sistema sanitario, tanto público como privado, con un proveedor de alto nivel, aportando alta tecnología y con un equipo altamente especializado”.

Otro de los motivos del gran potencial de la traumatología es la alta expectativa de vida de la población. Los últimos estudios de mercado anticipan que, en los próximos 10 años, el sector crecerá a una velocidad del 6%, debido al desarrollo de un alto número de enfermedades crónicas. En la misma línea, el mercado de la cirugía reconstructiva (rodillas, caderas, hombros) supone alrededor de 250 millones de euros en España y otros 50 millones en Portugal. En definitiva, esta área de negocio representa una gran oportunidad de crecimiento y desarrollo futuro. No en vano, se calcula que aportará un crecimiento sostenido a la compañía durante los próximos 5-8 años.

Canales señala que Cardiva, creada en 1989 en Bilbao y con sedes en Lezama y Madrid, “lleva en su ADN la proactividad, poniéndonos a disposición del sistema e intentando cubrir esos espacios. Ha sido una fórmula de éxito en todos estos años y la unidad de traumatología viene a mimetizar ese modelo de negocio”.

Un modelo de negocio que ahora se complementa con el acuerdo alcanzado con Permedica. “Nos incorporamos a este mercado de la mano de un nuevo socio: Permedica, un fabricante italiano, con una trayectoria similar a la nuestra, que comparte nuestras inquietudes. Estamos muy ilusionados con esta nueva aventura, que supondrá una propuesta de valor única, tanto para el cliente final como para el sistema sanitario”, asegura Ignacio Vega, presidente de Cardiva.

Amplia red

Según los directivos, este proyecto permite ahora “complementarnos con dos aspectos adicionales: productos de alta tecnología con Permedica, nuestro proveedor italiano, y una red de comercialización experta con un gran conocimiento de la técnica quirúrgica, de las nuevas tecnologías y de la capacidad de las necesidades de los profesionales de la salud”.

Así, Cardiva, “con una capacidad de inversión clave, apuesta así por una unidad de negocio con contratación de gente con experiencia, de adquisición de materiales para tener un stock intermedio en el país e intentar evitar problemas en la cadena de suministro, y un “expertise” y un prestigio ya consolidado en el sistema sanitario, además de una red de contactos importantísima a nivel nacional”.

La apuesta estratégica de la compañía pasa por la inversión en personal con talento, pilar básico del proyecto. “Nosotros aportamos al sistema un valor añadido— explica Canales— porque tenemos un producto de primer nivel, una red comercial extensa versada en los mecanismos de ventas y con un alto grado de conocimiento del catálogo, una logística extrema y aportamos un montón de aparataje adiciona al implante o al instrumental especifico. Todo ello aporta valor al sistema, al profesional y al paciente”.

Con una plantilla que supera las 160 personas y una amplia red de oficinas, Cardiva opera en España, Portugal e Italia, y ofrece más de 4.000 referencias para tratar a más de 300.000 personas cada año, siempre con el propósito de ofrecer soluciones médicas innovadoras que mejoren la salud de los pacientes y favorezcan la sostenibilidad de los sistemas sanitarios.

En 2021 Cardiva alcanzó los 81 millones de facturación. Cierra el año 2022 con los deberes cumplidos, dentro de los parámetros previstos en cuanto a presupuestos y exportación, y con la presentación de una nueva área que va a proporcionar mucho al resto de la compañía.

Vega asegura que la nueva unidad de Traumatología “va a añadir conocimiento a nuestras fábricas para aportar otro tipo de productos y nos va a ayudar en las áreas estratégicas donde estamos invirtiendo: el desarrollo de productos biológicos de factores de crecimiento. Eso es lo que esperamos: crecer en las nuevas líneas de inversión y de futuro y en las tradicionales, donde Cardiva está bien situada”.