Investigación

Los aceites esenciales de dos condimentos que usas a diario reducen el riesgo de infarto

Su consumo frecuente tiene, además, efectos antioxidantes y prebióticos, según una investigación española

Recipientes llenos de especias, entre ellas, comino
Recipientes llenos de especiasIsabelle Rozenbaum©GTRESONLINE

Dos de los condimentos más usados en la gastronomía española, el orégano y el tomillo, tienen un potente efecto prebiótico y antioxidante, y su consumo frecuente ayuda a reducir el riesgo cardiometabólico severo. Así lo demuestra una investigación en ratones liderada por científicos del Instituto de Investigación Biomédica de Málaga y Plataforma en Nanomedicina, el Hospital Universitario Virgen de la Victoria y la Universidad de Málaga (UMA) que evidencia que el uso de estos ingredientes-administrados como nutracéuticos- mejora los factores de riesgo para la salud cardiovascular, incluyendo el colesterol.

Los nutracéuticos son complementos alimenticios, en forma de comprimidos, cápsulas, líquidos, gomas o polvos, que contienen nutrientes como vitaminas, aminoácidos, minerales, extractos de plantas y otros. Los microorganismos vivos presentes en estos compuestos han demostrado que pueden ayudar a prevenir y tratar diversas enfermedades crónicas, como el síndrome del intestino irritable, la enfermedad inflamatoria intestinal y la obesidad, así como otras enfermedades relacionadas con la microbiota intestinal.

Para realizar esta investigación se utilizó un método innovador, que integró el análisis de múltiples tipos de datos biológicos, utilizando un modelo humanizado de ratón al que se trasplantó microbiota intestinal de pacientes con enfermedad coronaria (CAD) y diabetes tipo 2 (T2DM). El objetivo era explorar los efectos de los aceites esenciales de tomillo y orégano administrados como nutracéuticos para el manejo de una condición cardiometabólica compleja.

Los científicos estudiaron el efecto de estos dos nutracéuticos por medio del análisis exhaustivo de las proteínas del tejido cardíaco, revelando los mecanismos moleculares por los que los aceites esenciales regulan la función de las mitocondrias, el estrés oxidativo y la contracción cardíaca, indicó la Junta de Andalucía en un comunicado.

También analizaron el microbioma de los animales después de administrarles los aceites esenciales de tomillo y romero, y observaron un aumento de bacterias beneficiosas- como la Lactobacillus- y de los niveles de ácidos grasos beneficiosos de cadena corta (SCFA) en las muestras fecales, además de la disminución del género bacteriano perjudicial Colidextribacter. Estos cambios en la microbiota intestinal tiene implicaciones importantes en la salud metabólica y la respuesta inflamatoria, dos aspectos clave de los trastornos cardiometabólicos.

"Se validó el poder antioxidante de la administración de los aceites esenciales al reducir los niveles plasmáticos de moléculas oxidantes, al mismo tiempo que se observó una mejoría en los factores de riesgo para la salud cardiovascular, incluyendo el colesterol", explicó la investigadora del grupo Investigación Cardiovascular para la Salud de Ibima Plataforma Bionand, María José Sánchez, según recoge Ep.