Estudio

Basta con reducir este alimento para mejorar los síntomas del síndrome del intestino irritable

Dolor abdominal, estreñimiento o diarrea son algunos de los síntomas de este síndrome que puede afectar hasta el 12% de la población

Alimentación para el cáncer de colón
Alimentación adecuada para el colonDREAMSTIMEDREAMSTIME

El síndrome del intestino irritable (SII) puede deteriorar la calidad de vida de quien lo sufre, ya que implica síntomas tan incómodos como dolor abdominal, estreñimiento, diarrea u otras molestias. Se estima que el síndrome del intestino irritable, también conocido como colon irritable, es muy frecuente en nuestro país, ya que se calcula que ente el 2,3 y el 12% de la población española padece esta enfermedad, siendo más frecuente en las mujeres.

Ante esta situación, llevar una dieta saludable y controlar muy bien los alimentos que se incluyen en el plato suele ser una de las recetas más eficaces para controlar los síntomas. Sin, un nuevo estudio confirma que basta con eliminar un producto de la dieta para lograr los efectos deseados. En concreto, los pacientes con enfermedad gastrointestinal SII mejoraron tanto al comer menos azúcar y almidón como aquellos que siguieron la dieta recomendada por su especialista, que suele ser muy estricta con alimentos permitidos y otros muchos que no, en la que se suele excluir también el gluten y la lactosa. Así lo confirman los resultados de un nuevo estudio realizado por la Universidad de Lund, en Suecia, y publicado en la revista científica "Nutrients". Además, el estudio también muestra que la pérdida de peso es mayor y los antojos de azúcar se reducen entre quienes siguen una dieta reducida en almidón y sacarosa.

Impulsado por el investigador Bodil Ohlsson, profesor de la Universidad de Lund y consultor del Hospital Universitario de Skåne, este trabajo deriva del descubrimiento de un genetista, quien observó que una variación genética que dificulta la descomposición de los azúcares y los almidones en el intestino está sobrerrepresentada entre los pacientes con SII, lo que llevó a los investigadores a optar por intentar dar a estos pacientes menos azúcar y almidón.

En concreto, Ohlsson dirigió hace unos años un estudio en el que participaron 105 personas con SII. Durante cuatro semanas, comieron significativamente menos azúcar y almidón, lo que se conoce como dieta reducida en almidón y sacarosa (SSRD). Además de los dulces, también debían evitarse los alimentos altamente procesados. Los resultados de ese estudio mostraron que la dieta SSRD redujo en gran medida los síntomas del SII, como dolor recurrente y opresión en el abdomen, así como diarrea y/o estreñimiento.

El estudio actual, publicado Nutrients, aborda una pregunta que ninguna otra investigación ha abordado anteriormente: ¿cómo se compara la SSRD con la recomendación dietética actual para el SII, denominada FODMAP? Para ello, desde 2022 los investigadores han comparado ambos tipos de alimentación. En concreto, los participantes de ambos grupos debían seguir los principios básicos de cada dieta. Pero eligieron con qué frecuencia o regularidad comían. En ambos grupos, independientemente de la dieta, los síntomas del SII mejoraron en el 75-80 por ciento de los pacientes, lo que según Bodil Ohlsson "fue incluso mejor de lo que esperábamos". Además, la pérdida de peso después de cuatro semanas fue mayor en el grupo SSRD, "mientras que los antojos de azúcar también fueron los que más disminuyeron en este grupo, lo cual es positivo, ya que los pacientes con SII pesan más en promedio que las personas sanas", advierte Ohlsson.

“En realidad, ni siquiera llamaríamos dieta a la SSRD. Así es como todos deberían comer, no sólo aquellos con SII. Y a diferencia de Low FODMAP, SSRD es fácil de entender y de seguir. Puedes comer de todo cuando te invitan a cenar, pero menos de ciertas cosas. Si descansas tu estómago durante el resto de la semana, ¡algún día podrás darte un capricho!'', reconoce Ohlsson.