Longevidad

La ciencia confirma si el ejercicio intenso alarga la vida 5 años más

¿Los atletas de élite viven menos o es un mito? Un nuevo estudio determina cómo impacta la actividad física de alta intensidad en la longevidad

La ciencia confirma si el ejercicio intenso alarga la vida de los deportistas de élite
La ciencia confirma si el ejercicio intenso alarga la vida de los deportistas de éliteFreepik

Aunque todo el mundo sabe que hacer ejercicio con regularidad es importante para llevar una vida sana, algunos estudios han demostrado que hacer demasiado ejercicio puede tener el efecto contrario. Muchas veces escuchamos que los deportistas de élites tienen peor salud y viven menos por abusar de la actividad física. Incluso que hacer ejercicio de alta intensidad puede ser contraproducente en general, sin reparar en individualidades. Pero ¿es eso cierto? ¿Los atletas de élite viven menos o es un mito? ¿Cómo impacta ejercicio intenso en nuestra longevidad?

Un nuevo estudio, publicado recientemente en el British Journal of Sports Medicine, sugiere que las personas que practican ejercicio extremo pueden vivir más tiempo. «En la comunidad existe la obstinada opinión de que se puede hacer demasiado ejercicio», reconoce el doctor André la Gerche, cardiólogo deportivo, director del Laboratorio de Ensayos sobre Corazón, Ejercicio e Investigación (HEART) —respaldado por el Instituto de Investigación Médica St. Vincent y el Instituto de Investigación Cardiaca Victor Chang—, y autor principal de este estudio.

«Pensamos que esta creencia era una oportunidad de oro para estudiar una hazaña que, en su momento, se consideró imposible y que podría estresar al organismo más allá de sus límites: recorrer una milla en menos de cuatro minutos», explica. A pesar de que un buen número de personas lo logra, bajar de cuatro minutos al hacer 1.609 metros en pista continúa siendo un reto para muchos corredores y corredoras. «Se especulaba con que intentar tales esfuerzos podría tener un efecto perjudicial en el cuerpo, por lo que era una oportunidad para abordar esta falacia».

Así pues, los investigadores hicieron un seguimiento de un selecto grupo de 200 corredores de élite capaces de correr una milla por debajo de los 4 minutos. Procedían de 28 países de Norteamérica, Europa, Oceanía y África. Todos habían nacido entre 1928 y 1955, y tenían una media de 23 años cuando corrieron una milla en menos de 4 minutos.

De los 200 participantes, el 30% habían fallecido, por lo que 140 seguían vivos en el momento del estudio. Los investigadores descubrieron que la edad media de fallecimiento de todos los participantes en el estudio era de 73 años, pero que la edad media de los corredores de élite supervivientes era de 77 años. Es decir, los corredores de élite podrían vivir una media de cinco años más que la población general.

Y esto, en función de su esperanza de vida prevista en función de la edad, el sexo, el año de nacimiento y la nacionalidad. Así, los que corrieron una milla en menos de 4 minutos durante la década de 1950 vivieron una media de nueve años más que la población general. Los participantes que lo consiguieron en la década de 1960 vivieron unos 5,5 años más, y en la década de 1970 unos 3 años más.

El doctor la Gerche afirma que no les sorprendieron estos hallazgos en relación con los corredores de élite, ya que coinciden con otras publicaciones, como la de los ciclistas del Tour de Francia, en los que se ha observado una mayor longevidad. «Nuestro estudio se propuso ver cómo afectaba el ejercicio a los atletas de élite a largo plazo», garantiza.

«Sabemos que los deportistas de élite tienen el corazón más grande debido a su esfuerzo aeróbico sostenido. Existía la creencia de que esto podría afectar a su salud y longevidad, pero descubrimos lo contrario», sostiene. «Cinco años de vida extra en comparación con la media es muy significativo, sobre todo cuando comprobamos que muchos de estos corredores no sólo disfrutaban de una vida larga, sino que además estaban sanos. Viven mejor, durante más tiempo», añade.

¿Cómo se puede vivir más si no se es un atleta de élite?

Por supuesto, no todas las personas pueden correr una milla por debajo de los 4 minutos o ser un atleta de élite. Entonces, ¿cómo puede la población general aplicar estos hallazgos a su propio régimen de ejercicio para, con suerte, alargar su vida?

«Aunque en la ciencia se nos dice que no debemos extrapolar, personalmente uso estos datos como una aspiración para intentar emular tantos factores de estilo de vida de un corredor de 4 minutos: buena dieta, consumo moderado de alcohol, dedicación y ejercicio regular e intenso», afirma la Gerche. «Aunque no puedo compartir necesariamente la predisposición genética que, probablemente, también contribuye a la velocidad de élite, el resto puedo intentar conseguirlo».

Así pues, los resultados de este estudio demuestran que este nivel de forma física en una etapa temprana de la vida está relacionado con la longevidad. Al margen de sus limitaciones, es otra prueba más de la importancia del ejercicio, sea cual sea su nivel de intensidad. En general, la actividad física se relaciona con mejoras de la salud cardiovascular y es de esperar que extienda la vida.