
Alimentación
¿Cuál es la carne más magra para comer? Esta es la respuesta
Acompañar la carne con verduras frescas, cereales integrales y grasas saludables es la mejor manera de obtener todos los nutrientes necesarios

Seguir una dieta equilibrada y saludable implica prestar atención a la calidad de los alimentos que consumimos, y la elección de la carne adecuada deberíamos tenerla más en cuenta. Si bien la carne es una fuente esencial de proteínas, algunas variedades contienen más grasa que otras.
La pechuga de pollo es la opción número uno
Cuando se habla de carnes magras, la pechuga de pollo es una de las primeras opciones que vienen a la mente. Este corte es extremadamente bajo en grasa y alto en proteínas, lo que lo convierte en un alimento básico para atletas y personas que siguen dietas hipocalóricas.
Además de ser baja en calorías, es muy versátil y puede prepararse de diversas maneras. Para potenciar su sabor sin aumentar el contenido calórico, es ideal marinarla con especias y hierbas naturales en lugar de utilizar salsas grasosas.
La pechuga de pavo es otra excelente alternativa
La pechuga de pavo tiene un alto contenido proteico y una cantidad muy reducida de grasa, además de ser una carne altamente saciante, lo que ayuda a controlar el apetito. Su sabor suave permite que se adapte a una amplia variedad de recetas, desde platos fríos como ensaladas hasta preparaciones calientes como guisos ligeros o asados.
Incluir pavo en la dieta puede ser una estrategia efectiva para reducir el consumo de grasas saturadas sin renunciar a una buena fuente de proteínas.
Carnes magras de res: lomo y solomillo
Si eres amante de la carne roja, no es necesario eliminarla por completo de tu dieta. Existen cortes magros de res que pueden encajar en un plan de alimentación saludable. Entre las mejores opciones están el lomo y el solomillo, que contienen menos grasa en comparación con otros cortes.

Además, la carne de res es una excelente fuente de hierro y zinc, minerales fundamentales para la salud. Para hacerla más saludable, lo ideal es cocinarla a la plancha, al horno o en guisos con poca grasa, evitando frituras y salsas pesadas.
La ternera, una carne roja más ligera
Otra opción dentro de las carnes rojas es la ternera, que tiende a tener menos grasa que otros tipos de carne de res. La ternera puede cocinarse de diversas formas sin perder su jugosidad ni su sabor, y se puede combinar con verduras para crear platos más equilibrados y nutritivos.
El pescado como alternativa saludable
Si bien no es carne en sentido estricto, el pescado es una de las mejores opciones cuando se busca una fuente de proteína magra. Variedades como el bacalao y la merluza son especialmente bajas en grasa y muy digeribles, ideales para quienes desean una alimentación ligera.
Por otro lado, pescados grasos como el salmón o la sardina contienen ácidos grasos omega-3, beneficiosos para la salud cardiovascular. Incluir pescado en la dieta no solo diversifica las fuentes de proteína, sino que también aporta nutrientes esenciales para el organismo.
✕
Accede a tu cuenta para comentar