Alimentación saludable

Ni nueces ni pistachos: el mejor fruto seco para proteger la piel en verano

Rico en antioxidantes y grasas saludables, este fruto seco infravalorado es un gran aliado para cuidar la piel durante los meses de más sol

El mejor fruto seco para proteger la piel en verano
Ni nueces ni pistachos: el mejor fruto seco para proteger la piel en veranoFreepik

Con la llegada del verano, las altas temperaturas y la exposición prolongada al sol obligan a prestar una atención especial a la salud de la piel. Además de los protectores solares y una buena hidratación, la alimentación también puede convertirse en una aliada clave para cuidar nuestra dermis. Entre los distintos superalimentos que recomiendan los expertos, los frutos secos ocupan un lugar destacado. Pero, ¿cuál es el mejor de todos para proteger la piel? La respuesta puede sorprender.

El mejor fruto seco para proteger la piel

Las avellanas, fruto del avellano, son mucho más que un ingrediente estrella en postres y cremas de cacao. Su perfil nutricional es excepcional, especialmente cuando se habla del cuidado de la piel. Según datos del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), las avellanas son el fruto seco con mayor contenido de vitamina E, un potente antioxidante que actúa como un escudo protector frente al daño celular provocado por los radicales libres.

Esta vitamina liposoluble es fundamental para mantener la elasticidad y firmeza de la piel, favorece la regeneración celular y ayuda a reducir la inflamación. En verano, cuando la radiación UV es más intensa, su papel es aún más crucial para evitar el fotoenvejecimiento, la aparición de manchas y la pérdida de colágeno.

Además de su alto contenido en vitamina E, las avellanas contienen otros compuestos bioactivos de interés, como flavonoides y polifenoles, que refuerzan su acción antioxidante. Estos compuestos ayudan a combatir el estrés oxidativo, mejoran la circulación y podrían incluso tener un efecto protector frente a algunos tipos de cáncer de piel, según apuntan estudios preliminares.

También son ricas en grasas monoinsaturadas, similares a las del aceite de oliva, que favorecen la hidratación desde dentro y mantienen la barrera lipídica natural de la piel. A esto se suman minerales esenciales como el magnesio y el cobre, implicados en la producción de colágeno y elastina.

Avellanas
Avellanasistock

Cómo incorporar las avellanas a tu dieta diaria

A diferencia de otros productos destinados al cuidado de la piel, las avellanas no requieren rituales complicados para aprovechar sus beneficios. Se pueden consumir crudas, tostadas (sin sal ni azúcar añadida) o incluso en forma de crema 100 % natural. Lo ideal, según recomiendan los nutricionistas, es incluir una porción moderada diaria, aproximadamente 30 gramos, o lo que equivale a unas 20 unidades, dentro de una dieta equilibrada.

Se pueden añadir al yogur del desayuno, como topping en ensaladas, en batidos o como snack saludable entre horas. Eso sí, debido a su densidad calórica, conviene no excederse si se busca mantener un peso saludable.

Aunque su consumo es especialmente útil durante los meses de sol, los beneficios de las avellanas para la piel y la salud general hacen que sean un alimento interesante todo el año. De hecho, se ha comprobado que su inclusión regular en la dieta también contribuye a la salud cardiovascular, al buen funcionamiento del sistema nervioso y a reducir la inflamación sistémica.

Como ocurre con todos los frutos secos, es importante asegurarse de que no se padece alergia a las avellanas antes de consumirlas. También se recomienda optar por versiones lo menos procesadas posible para evitar azúcares añadidos o aceites poco saludables.

Si estás buscando una manera natural y deliciosa de cuidar tu piel desde el interior este verano, las avellanas se posicionan como una opción imbatible. No sólo por su sabor, sino por su impresionante perfil nutricional, que las convierte en un auténtico aliado antioxidante.