Día Mundial de la Prevención del Cáncer de Cuello Uterino

El cáncer de cérvix desaparece en las vacunadas frente al VPH

Escocia no registra ningún caso de este tipo de tumor en mujeres jóvenes inmunizadas frente al virus del papiloma humano

Vacuna VPH en niños
Vacuna VPH en niñosDREAMSTIMEDREAMSTIME

Que las vacunas son la medida sanitaria más eficaz es algo fuera de toda duda y que pudimos comprobar recientemente con la crisis de la Covid-19. La introducción de nuevas inmunizaciones no es frecuente, pero otro buen ejemplo es la del virus del papiloma humano (VPH), uno de esos hitos que, como suele pasar en estos casos, también suscitó controversia en su día pese a ser la primera –y hasta ahora única– vacuna contra el cáncer, en este caso el de cérvix.

Ahora, con la perspectiva que da el tiempo, esta medida ha demostrado con creces sus grandes beneficios. Un claro ejemplo del éxito de esta iniciativa es Escocia, que reportó cero casos de cáncer cervicouterino en las mujeres que desde 2008 han sido vacunadas a los 12-13 años contra el virus.

Un nuevo estudio, llevado a cabo por el Public Health Scotland (PHS) y publicado en la Revista del Instituto Nacional del Cáncer, ha descubierto que no se han detectado casos de este tumor en mujeres jóvenes que han sido completamente vacunadas como parte del programa de inmunización contra el virus, motivo por el que no duda en afirmar que la vacuna contra el VPH es «altamente eficaz» para prevenir el desarrollo del cáncer. El programa de vacunación escocés comenzó en el año 2008 y a las niñas se les ofreció la vacuna en su primer curso de escuela secundaria, con 12 o 13 años.

Este año Sanidad ha simplificado su pauta vacunal a una sola dosis en personas de 15 a 25 años

Una buena prueba de efectividad para celebrar, hoys 26 de marzo, el Día Mundial de la Prevención del Cáncer de Cuello Uterino.

El VPH es una infección de transmisión sexual más frecuente a nivel mundial, responsable de casi todos los casos de cáncer de cérvix, la cuarta causa más común de neoplasia en las mujeres en todo el mundo. Sin embargo, poco más de un tercio de la población general la conoce. No distingue entre géneros, edad ni orientación sexual. Se estima que el 80% de las personas sexualmente activas, pueden tener contacto con el VPH en algún momento de su vida.

Y es que, como recuerda la Asociación Española de Patología Cervical y Colposcopia, el VPH es el responsable de prácticamente la totalidad de los cánceres de cuello del útero (cérvix) y sus lesiones premalignas, así como de una proporción variable de cánceres de vagina, vulva, ano, pene y región orofaríngea (cavidad oral, faringe y laringe). También es responsable de la aparición de las verrugas genitales (condilomas) y de una enfermedad llamada papilomatosis respiratoria recurrente.

Porque, aunque la mayor parte de las infecciones cursan de forma asintomática y van a remitir espontáneamente, muchas de ellas incluso pasarán inadvertidas, en torno al 10-20% van a persistir en el tiempo pudiendo dar lugar a lesiones premalignas o cáncer en diferentes localizaciones.

Cambios en la pauta

El estudio de Escocia da una idea del camino a seguir con esta inmunización, cuya cobertura sigue siendo ampliada y simplificada en los últimos tiempos. Así, a la importante novedad que supuso la ampliación de la vacunación del VPH a niños –en concreto en varones de 12 años– en el calendario del SNS, en enero de 2023, hay que sumarle la realizada este 2024, por la cual el Ministerio de Sanidad ha simplificado su pauta vacunal, proponiendo solo dos dosis en personas de 15 a 25 años de edad. Se mantiene la pauta de tres dosis en personas con inmunodepresión de cualquier edad a partir de los nueve años de edad y demora hasta el próximo año el eventual paso a la pauta de una sola dosis en la vacunación de los adolescentes frente al VPH.

De esta forma quizás se consiga lo que nunca hasta ahora: erradicar un tipo de cáncer o convertirlo en una enfermedad rara.