La candidiasis vaginal es más común de lo que crees (y no lo sabías)
Esta dolencia afecta a tres de cada cuatro mujeres en algún momento de su vida
La candidiasis vaginal es más común de lo que crees (y no lo sabías)Freepik
Muchas mujeres han tenido o tienen candidiasis vaginal y no lo saben. La mayoría la contraerá en algún momento de sus vidas, ya que afecta a tres de cada cuatro mujeres (aunque se cree que las cifras pueden ser más altas ya que suelen pasarse por alto). Los síntomas de esta infección incluyen ardor, picor, además de flujo espeso y de color blanco. La candidiasis vaginal es fácil de tratar, pero es importante consultar al médico si crees que tienes una infección.
El problema es que los síntomas de la candidiasis vaginal son similares a los de otras infecciones y enfermedades de transmisión sexual. Por ello, debemos permanecer atentas a la evolución de nuestra afección, pues una ETS puede resultar más severa y derivar en problemas de salud graves.
Síntomas de la candidiasis
La candidiasis vaginal es una infección de la vagina y la vulva causada por un aumento del hongo Cándida. Entre todas las especies, la Candida albicans es la más frecuente (90% de los casos). Pero cabe destacar que la candidiasis no es una ETS y no se disemina a través de las relaciones sexuales. Sin embargo, algunos hombres pueden presentar síntomas después de tener contacto sexual con una pareja infectada, como irritación en el pene.
La realidad es que esta infección se conoce como "oportunista" ya que depende, en gran parte, de los mecanismos de defensa de la persona. Por ejemplo, cómo es nuestra flora íntima o si tenemos una inmunidad celular competente. Sin embargo, sí hay factores para evitar la infección. De hecho, estar mucho tiempo con el bañador mojado es la principal causa de aparición de la candidiasis vaginal. ¡Y también puede evitarnos una cistitis!
Infecciones del tracto urinario inferior en mujeres.Freepik
El prurito vulvar (picor vaginal o escozor) es el síntoma más común de la candidiasis. Este suele asociarse con ardor o dolor en el área vaginal y pueden estar acompañados de disuria (dolor al orinar) y dispareunia (dolor durante el acto sexual). Otros signos comunes son la inflamación o el enrojecimiento en la zona de la vulva, así como la aparición de flujo vaginal generalmente lechoso o tipo queso cortado y sin olor.
Los factores de riesgo que se relacionan con la aparición de la Cándida son padecer diabetes, el uso reciente de antibióticos, los cambios hormonales (en situaciones como un embarazo o en la menopausia es más común la aparición de vulvovaginitis por candidiasis), la inmunosupresión o tomar anticonceptivos orales/terapia hormonal, que eleva los niveles de estrógenos.
Una candidiasis que no se trata puede derivar en grietas y úlceras
La candidiasis se complicaría si sus síntomas se agravan. Y así, si se sufre enrojecimiento extendido, hinchazón y picazón pueden terminar produciendo desgarros o grietas (fisuras) o úlceras. Esto es habitual si has sufrido cuatro o más candidiasis vaginales en un año; si la infección es causada por un tipo de cándida que no es albicans o si el sistema inmunitario está debilitado debido a ciertos medicamentos o trastornos como infección por VIH.
Podríamos reducir el riesgo de sufrir esta infección usando ropa interior de algodón y pantalones sueltos. Así mismo, se recomienda evitar vestir ropa interior o medias ajustadas, cambiar de inmediato la ropa mojada (trajes de baño, ropa de deporte), evitar los jacuzzis o tomar duchas muy calientes y no abusar del uso de los antibióticos, salvo prescripción médica.
¿Cómo tratar la candidiasis en la mujer?
Para efectos de tratamiento, la candidiasis vaginal se divide en dos grupos: no complicada y complicada. Para ser considerada una candidiasis vaginal no complicada debe ser esporádica, ocurriendo no más de tres episodios al año; provocada por la Candida albicans y darse en mujeres sanas y no embarazadas. En estos casos, los tratamientos recomendados son tópicos intravaginales: ungüentos y cremas que contienen antifúngicos de venta en farmacia.
Si la candidiasis vaginal es recurrente, el tratamiento de casos recurrentes de candidiasis puede ser difícil, lento y frustrante. El tratamiento debe estar basado en tres ejes: la eliminación de los factores de predisposición (por ejemplo, controlar mejor la diabetes o usar pastillas más débiles), terminar con la infección actual y prevenir la recurrencia. El tratamiento más adecuado para la candidiasis persistente son anantifúngicos orales durante tiempo prolongado, llegando a los seis meses de tratamiento en ocasiones, siempre siguiendo las pautas del ginecólogo/a.
En caso de candidiasis no recurrentes, pero con síntomas muy intensos es prácticamente obligado el uso combinado de tratamientos orales y tópicos para aliviar la sintomatología rápidamente. Los medicamentos orales para aliviar los síntomas de la vulvovaginitis, tardan entre 24 y 48 horas más en hacer efecto que los ungüentos u óvulos vaginales. Por ello puede ser habitual combinar ambos tratamientos.
¿Y si el hongo no es Candidiasis albicans? Entonces puede ser Candida glabrata o Candida krusei. En ambos casos, el antifúngico es diferente al de la Cándida común y será el ginecólogo el que indique el tratamiento a seguir.
Remedios caseros para la candidiasis
Reportes anecdóticos sugieren que muchas mujeres encuentran alivio a su candidiasis al usar algunos remedios caseros. Algunas investigaciones apuntan que las cápsulas de ácido bórico aplicadas tópicamente tratan con éxito aproximadamente al 70% de las mujeres con este problema. También hay mujeres dicen sentir alivio al agregar aceite de árbol de té diluido a un tampón o impregnarlo de yogur natural sin azúcar y sin sabor e insertarlo en la vagina durante la noche. De la misma forma, algunos suplementos probióticos pueden ofrecer una solución natural a la infección por hongos.
