Cuenta atrás para el cambio de ciclo

El pasado 29 de mayo, tan sólo un día después de su abultada derrota en las elecciones autonómicas y municipales, Pedro Sánchez nos sorprendió a todos –incluso a los suyos– convocando elecciones generales para el próximo 23 de julio.

En su intento por evitar que la historia se repita y de procurarse alguna opción de seguir en La Moncloa, Sánchez no ha hecho si no acortar tiempos y acelerar el cambio de ciclo que pronostica la práctica totalidad de los sondeos que se publican a diario.

Estamos, en consecuencia, en la cuenta atrás (42 días desde hoy) para que dicho cambio se materialice; un cambio imprescindible considerando que la deuda pública es mayor que nunca, que el desempleo está disparado… y, entre otros hechos, que el Sistema Nacional de Salud (SNS) atraviesa su peor momento en décadas.

Peores listas de espera quirúrgicas desde el año 2003, peor valoración de los ciudadanos del SNS desde 2005, más de 600 días para acceder a innovaciones terapéuticas, atención primaria al borde del colapso...

Tras el paso de cinco ministros, el balance 2018-2023 de «Sanchismo sanitario» es negativo y los representantes de pacientes, profesionales, industria farmacéutica y tecnológica... piden un Pacto de Estado, una actualización de la normativa vertebradora del sistema, una financiación adecuada, cogobernanza real... piden un nuevo Gobierno que reconduzca el SNS hacia la senda de la calidad, la cohesión y la sostenibilidad que nunca debió dejar.

Nos acechan tiempos complejos, pero, como suele decirse, «la noche siempre es más oscura justo antes del amanecer» y estoy convencido de que en los próximos cuatro años, con un nuevo presidente del Gobierno, la viabilidad de nuestra Sanidad dejará de correr peligro y el SNS será desarrollado en la dirección y en la proporción que necesitamos.