Descubren que estos fármacos de uso común reducen el riesgo de cáncer de hígado

Casi 7.000 personas en España serán diagnosticadas con cáncer de hígado en 2024. Se trata de una enfermedad muy estigmatizada, pese a que solo un pequeño porcentaje de casos se relacionan con el consumo abusivo de alcohol. Entre tanto, las tasas de afectados crecen año tras año hasta el punto de que los casos por cáncer de hígado aumentarán en más de un 50% en los próximos 20 años.

Además, es uno de los cánceres más letales. El las últimas décadas ha habido muy pocas mejoras en cuanto a la supervivencia a nivel mundial, por lo que la prevención es una herramienta clave. Cuando la enfermedad se detecta en fase temprana y todavía hay opción de cirugía, la supervivencia a 5 años es de más del 50%. Cuando ya hay metástasis, la cifra se queda en un 5%.

Por lo tanto, estudiar nuevos métodos para prevenir el cáncer de hígado es interesante en el campo de la investigación. Para ello, resulta importante conocer bien qué efecto tienen los medicamentos de los que ya disponemos en la aparición de esta enfermedad. En esta línea, un nuevo estudio científico señala que un grupo de fármacos de uso común para reducir el colesterol pueden minimizar el riesgo de cáncer de hígado.

Esto podría resultar relevante en España, un país donde el 56% de las personas mayores de 25 años tienen el colesterol elevado. Tener el colesterol alto conduce a la aterosclerosis o la inflamación de las arterias. Esto provoca que la sangre no pueda llegar a los distintos órganos, como el corazón y el cerebro (ictus). Esto convierte al colesterol alto en el principal factor de riesgo de un infarto de miocardio.

Por lo tanto, si se probara la eficacia de los medicamentos para reducir el colesterol también en cáncer de hígado, estaríamos matando varios pájaros de un tiro. Estudios anteriores han sugerido que tomar estatinas para reducir el colesterol puede disminuir el riesgo de desarrollar cáncer de hígado. No obstante, no todo el mundo puede tomar estatinas por sus efectos secundarios.

Ahora, el nuevo estudio publicado en la revista Cancer de la Sociedad Americana del Cáncer indaga en los efectos de los medicamentos reductores del colesterol sin estatinas. Según sus resultados, los fármacos que pertenecen a un tipo se relacionaron con más de un 30% menos de riesgo de cáncer de hígado.

Qué son los inhibidores de la absorción del colesterol

Los inhibidores de la absorción del colesterol, los secuestradores de ácidos biliares, los fibratos, la niacina y los ácidos grasos omega-3 son tipos de medicamentos no estatínicos para reducir el colesterol que se recetan para controlar los niveles de colesterol y lípidos. Las distintas clases de fármacos actúan de maneras diferentes.

Un equipo dirigido por la doctora Katherine A. McGlynn, del Instituto Nacional del Cáncer, buscó asociaciones entre estos cinco tipos de medicamentos no estatínicos para reducir el colesterol y el riesgo de cáncer de hígado, el sexto tipo de cáncer más frecuente en todo el mundo y la tercera causa de mortalidad por cáncer.

Los investigadores utilizaron información de una base de datos de atención primaria que cubre aproximadamente información sobre el 7% de la población del Reino Unido. Su análisis incluyó 3.719 casos de cáncer de hígado y 14.876 controles emparejados sin cáncer. También se realizaron emparejamientos adicionales basados en el estado de diabetes tipo 2 y enfermedad hepática crónica de los individuos.

¿El resultado? El uso de inhibidores de la absorción del colesterol se asoció con un 31% menos de probabilidades de riesgo de cáncer de hígado en el análisis general. Estos medicamentos también se relacionaron con un menor riesgo de cáncer de hígado en los análisis basados en el estado de la diabetes y la enfermedad hepática. El estudio también confirmó que las estatinas se asociaban con un 35% menos de probabilidades de cáncer de hígado.

No se observaron asociaciones con el riesgo de cáncer de hígado en el caso de los fibratos, los ácidos grasos omega-3 o la niacina. Mientras que el uso de secuestrantes de ácidos biliares se asoció a una mayor probabilidad de cáncer de hígado en el análisis global, los resultados de los análisis basados en el estado de la diabetes y la enfermedad hepática fueron inconsistentes, lo que sugiere que es importante replicar estas observaciones.

«Dado que pocos estudios han examinado los efectos de los fármacos hipocolesterolemiantes sin estatinas sobre el riesgo de cáncer de hígado, los resultados de nuestro estudio deben repetirse en otras poblaciones. Sin embargo, si nuestros hallazgos se confirman en otros estudios, nuestros resultados podrían servir de base para la investigación sobre la prevención del cáncer de hígado», afirmó la Dra. McGlynn.