Estudio
Investigadores del CNIO proponen un nuevo tratamiento para la metástasis cerebral que no responde a la inmunoterapia
Han descubierto que el cáncer pervierte ciertas células cerebrales, los astrocitos, y hace que produzcan una proteína que actúa a favor del tumor. Sin embargo, un fármaco, la silibinina, podría utilizarse para tratar la metástasis cerebral con inmunoterapia
Las inmunoterapias contra las metástasis cerebrales (los tumores secundarios, aquellos que comienzan en otro órgano y se extienden después al cerebro) han mostrado beneficios clínicos cuando se aplican a pacientes asintomáticos, pero son en gran medida ineficaces en casos sintomáticos por razones desconocidas.
Ahora, un equipo de investigadores del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) ha descubierto que el cáncer pervierte ciertas células cerebrales, los astrocitos, y hace que produzcan una proteína que actúa a favor del tumor.
Pues bien, estos científicos proponen un nuevo tratamiento para las metástasis cerebrales basado en una combinación de un fármaco con inmunoterapia y aportan un biomarcador para predecir en qué casos debe utilizarse.
En concreto, los autores del estudio publicado hoy en en la revista "Cancer Discovery" de la Asociación Americana para la Investigación del Cáncer, proponen que una combinación de anticuerpos bloqueadores de puntos de control inmunitarios con la inhibición de la inmunosupresión local mediada por astrocitos puede beneficiar a los pacientes con metástasis cerebrales sintomáticas.
Pero vayamos por partes. El sistema inmunológico tiene un mecanismo para destruir virus, bacterias o células cancerígenas que ataquen al organismo. El cáncer crece cuando las células tumorales engañan a este sistema para que no las ataque.
La inmunoterapia contra el cáncer utiliza medicamentos para evitar que las células cancerosas bloqueen el sistema inmunológico. Pero la inmunoterapia no siempre funciona.
"Los ensayos clínicos con inmunoterapia en pacientes con metástasis cerebral indican tasas variables de respuestas positivas que oscilan del 0 al 60 %, pero principalmente los beneficios se observan en -pacientes con- metástasis asintomática y la respuesta desciende significativamente en sintomáticos", explica a este suplemento Neibla Priego, primera autora del estudio e investigadora del CNIO. Y son precisamente estos el objeto de este estudio.
El motivo por el que sucede esto se desconoce. Una hipótesis es la presencia de la barrera hematoencefálica, una especie de membrana permeable que filtra la sangre que entra en el cerebro para protegerlo de las toxinas. Pero esta barrera también frena la entrada de los anticuerpos utilizados en la inmunoterapia. Y sin anticuerpos, la inmunoterapia no funciona.
Pues bien, los investigadores del CNIO han descubierto que ciertas células cerebrales llamadas astrocitos interactúan con el sistema inmune del cerebro, y en caso metástasis cerebral hacen un mal uso de esta función hasta el extremo que interfieren en el trabajo de las células de defensa y les impiden matar a las células tumorales.
"Estas células, que tienen forma de estrella y ayudan al cerebro en situaciones normales, no son una población homogénea, sino que tienen una gran heterogeneidad por lo que podemos y queremos desarrollar terapias que ayuden contra el tumor y no ataquen al resto del tejido sano", explica Priego.
Y es que han descubierto que ciertos astrocitos producen TIMP1, una proteína implicada en la desactivación de las células defensivas que deberían destruir las células cancerígenas.
Tras demostrar que TIMP1 actúa sobre las células del sistema inmunitario y las vuelve menos efectivas, los investigadores del CNIO proponen utilizarla como biomarcador para detectar metástasis cerebrales.
"Es un gran biomarcador para estratificar pacientes porque se secreta en cantidades mayores en pacientes que sufren metástasis cerebral. Se triplica y cuatriplica en personas sin metástasis", precisa Priego.
El estudio va más allá. El grupo de Manuel Valiente, jefe del Grupo de Metástasis Cerebrales del CNIO y director del estudio, propone una alternativa terapéutica dirigida a los astrocitos: la combinación de inmunoterapia con inhibidores que impiden la producción de la molécula TIMP1.
En concreto, de un fármaco, la silibinina, que inhibe esta proteína y podría utilizarse para tratar la metástasis cerebral con inmunoterapia.
✕
Accede a tu cuenta para comentar