Oncología

Investigadores de Johns Hopkins eliminan la metástasis ósea en cáncer de mama y también la previenen en modelos de laboratorio

El fármaco experimental empleado es el RK-33, que impide que las células cancerosas se propaguen también a otras partes del cuerpo

mamografía, cáncer de mama
Una mujer se hace una mamografíaSinc

Entre el 20 y el 30% de las pacientes diagnosticadas de un carcinoma de mama desarrollará con el tiempo (incluso años después de haber terminado los tratamientos) cáncer de mama metastásico. Gracias a la investigación, la supervivencia está aumentando, pero sigue siendo muy baja: entre cuatro y cinco años de media.

Con la mirada puesta en este objetivo, investigadores de la Escuela de Medicina del Johns Hopkins, en Baltimore (Maryland, EE UU) han demostrado que un fármaco experimental elimina las metástasis óseas causadas por el cáncer de mama en modelos de laboratorio.

Se trata del fármaco RK-33, que también ayuda a tratar otros tipos de cáncer y enfermedades virales, tal y como se había demostrado previamente.

Se trata de todo un hallazgo, aunque sea tan solo en modelos de laboratorio, ya que los pacientes con cáncer de mama y metástasis ósea tienen opciones de tratamiento limitadas y a menudo dependen de cuidados paliativos para aliviar síntomas difíciles, como la fragilidad y el dolor.

Ahora, Venu Raman, profesor de radiología y ciencia radiológica y farmacología en la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins, y su equipo han desarrollado un posible tratamiento novedoso que es específico para la metástasis ósea del cáncer de mama y que puede funcionar con éxito en el microambiente óseo, que a menudo es resistente a los tratamientos.

Su último estudio, disponible en "Cancer Letters", se basa en el trabajo previo de Raman y sus colegas con RK-33. El fármaco se dirige a la proteína DDX3, que se encuentra elevada en las células cancerosas, y la inhibe.

“Una de nuestras principales dudas era si el RK-33 podría ser eficaz para tratar la metástasis ósea, basándonos en hallazgos de laboratorio previos que demostraron su eficacia para suprimir el crecimiento del cáncer de mama”, afirma Raman, quien también es miembro del Johns Hopkins Kimmel Cancer Center.

“Primero tuvimos que determinar si el DDX3 se expresaba en muestras de pacientes con metástasis ósea de cáncer de mama, y ​​descubrimos que el DDX3 se expresaba en niveles altos en estas muestras”, precisa en un comunicado del estudio.

Como explican los investigadores, la DDX3 es una helicasa de ARN, un tipo de proteína que desenrolla el material genético llamado ARN. Esta actividad regula varias funciones en las células tumorales o cancerosas, incluida la traducción del código genético del ARN en proteínas.

El papel de la proteína DDX3 en este proceso promueve el crecimiento de las células cancerosas, lo que contribuye a la propagación de la enfermedad.

Los estudios realizados por el equipo de Raman y otros indican que RK-33, un fármaco desarrollado en el laboratorio de Raman, puede prevenir estas funciones de la DDX3. Como resultado, puede ralentizar la progresión del cáncer al controlar el crecimiento y la proliferación de las células cancerosas.

Después de determinar que las células de metástasis óseas de cáncer de mama tenían altos niveles de DDX3, el equipo de investigación recurrió a ratones para probar si el RK-33 tenía algún efecto sobre la proteína DDX3 y la función de las células cancerosas.

Los investigadores primero trataron a un grupo de ratones que tenían metástasis óseas de cáncer de mama con RK-33. Las imágenes de estos ratones después del tratamiento confirmaron que el RK-33 parecía eliminar toda evidencia de metástasis óseas, al mismo tiempo que impedía que las células cancerosas en el hueso se "propagaran" a otros sistemas orgánicos, un fenómeno común en la metástasis ósea. Estos hallazgos indican que el RK-33 pudo atacar con éxito, detener el crecimiento y eliminar por completo las células de metástasis óseas de cáncer de mama al inhibir el DDX3 y penetrar con éxito en microambientes óseos que a menudo bloquean otras terapias.

El RK-33 también demostró ser prometedor en la prevención de la metástasis ósea del cáncer de mama. Los ratones con cáncer de mama que no se había propagado al hueso recibieron el fármaco y los investigadores observaron que el cáncer nunca se convirtió en metástasis ósea. Los investigadores tampoco observaron ninguna reacción adversa significativa al RK-33 en sus experimentos.

“Esta es una oportunidad de investigación única porque no se trata de la investigación clásica sobre supresores tumorales u oncogenes”, afirma Raman.

“Hemos demostrado que DDX3 participa en el desarrollo de cánceres agresivos y cómo RK-33 representa un avance significativo en la utilización de terapias dirigidas para cánceres que actualmente carecen de tratamientos específicos”, añade.

Los investigadores afirman que este estudio les acerca a los ensayos clínicos para el RK-33. Planean seguir investigando la capacidad del fármaco para tratar otras enfermedades.