Nutrición
Manuel Viso, doctor, desvela el verdadero impacto diario del atún en lata: "Aunque parezca sano..."
Rico en omega-3, este pescado no siempre es la mejor opción para tomar en el día a día
El debate sobre el consumo de atún en lata ha cobrado fuerza en los últimos meses, no solo por su presencia habitual en la mesa española, sino también por las dudas que despierta su ingesta diaria. A pesar de su accesibilidad y su perfil nutritivo, cada vez más especialistas advierten de que no conviene abusar de él.
La popularidad del atún en conserva se explica fácilmente: es económico, práctico y una fuente conocida de proteínas de calidad y ácidos grasos omega-3. Sin embargo, su contenido en mercurio está llevando a los expertos a pedir prudencia en su consumo habitual. Según la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), este figura dentro de los límites legales, que difiere de recomendables.
Un alimento sano, pero no para cada día
El médico Manuel Viso es uno de los profesionales que ha alzado la voz sobre este asunto. Señala que confiar en una lata de atún casi a diario "aunque parezca sano, no es una buena opción", a la vez que ha recordado que el mercurio es un metal pesado que el organismo elimina con dificultad y que puede acumularse con el tiempo.
Viso advierte de que esta acumulación puede afectar al sistema nervioso y favorecer problemas neurológicos como alteraciones de la memoria, dificultades de atención, disminución del coeficiente intelectual o trastornos motores. Estos efectos, recalca, son especialmente preocupantes en niños y mujeres embarazadas. También apunta a posibles repercusiones en el estado de ánimo, al interferir en neurotransmisores como la serotonina.
Aun así, el especialista insiste en que no se trata de desterrar el atún, sino de incorporarlo con moderación. Recomienda alternarlo con otras fuentes de omega-3 (sardinas, melva, salmón o incluso nueces) para seguir disfrutando de una dieta equilibrada sin incurrir en riesgos innecesarios.