Grave

Una niña de 12 años estuvo 3 días en coma debido al uso del vapeo

Cuando Sarah Griffin ingresó en el Hospital Real Victoria de Belfast, sus niveles de oxígeno estaban peligrosamente bajos

Una niña de 12 años estuvo 3 días en coma debido al uso del vapeo
Una niña de 12 años estuvo 3 días en coma debido al uso del vapeoRedes sociales Northern Ireland Chest Heart

La historia de Sarah Griffin, una niña de 12 años de Irlanda del Norte, ha conmocionado a la comunidad local y al mundo entero. El vapeo, una práctica que implica inhalar vapores de sustancias a través de dispositivos electrónicos, se ha convertido en una tendencia preocupante entre los jóvenes. La vida de Sarah estuvo al borde de un abismo tras sufrir complicaciones graves relacionadas con el uso del vapeo, que la llevaron a un coma de tres días y a una difícil recuperación.

Sarah, quien ya lidiaba con el asma, comenzó a toser una noche en su hogar. En un primer momento, sus padres creyeron que esta tos era una reacción al cambio climático, un desencadenante común de su asma. Sin embargo, al día siguiente, su dificultad para respirar se volvió alarmante. Sin perder tiempo, la llevaron al Hospital Real Victoria de Belfast.

En el hospital, los médicos descubrieron que los niveles de oxígeno de Sarah estaban peligrosamente bajos. Sus pulmones habían sufrido daños considerables, uno de ellos gravemente afectado, mientras el otro trabajaba en exceso, exacerbando su asma. Además, una infección complicaba aún más su estado de salud. La situación era tan crítica que los médicos se vieron obligados a inducir un coma y trasladarla a la unidad de cuidados intensivos.

Afortunadamente, tras tres días angustiosos, Sarah emergió del coma y pudo ser retirada del respirador. A pesar de esta victoria, los médicos explicaron que si Sarah no hubiera estado involucrada en el vapeo, habría tenido mejores probabilidades de combatir la infección desde el principio.

A pesar de haber recibido el alta del hospital, la recuperación de Sarah está lejos de ser sencilla. Se le considera un paciente de alto riesgo para futuras hospitalizaciones debido al impacto significativo que este episodio tuvo en su salud física. Ahora, Sarah debe enfrentar un arduo proceso de recuperación, con una nueva rutina de esteroides, inhaladores y un plan personalizado para controlar su asma en el futuro.

Esta historia no solo ha afectado profundamente a Sarah y su familia, sino que también ha generado una ola de conciencia sobre los riesgos asociados con el vapeo, especialmente entre los jóvenes. La organización Northern Ireland Chest Heart and Stroke ha utilizado este incidente como parte de su campaña de prevención del vapeo, con la esperanza de alertar a las personas sobre las consecuencias mortales de este hábito.