Día Mundial de la Voz

¿Qué hay que comer para cuidar la voz?

Los expertos desmienten algunos de los mitos más extendidos

Alimentos buenos para la garganta
Alimentos buenos para la gargantaFreepikFreepik

En algún momento de la vida todos hemos sufrido, o sufriremos, un problema de voz, razón más que potente para que hoy se celebre el Día Mundial de la Voz. Ronquera, laringitis, afonía, cambios de tono, molestias en las cuerdas vocales... El estilo de vida y la dieta influyen en la salud global y, por supuesto, también en la vocal. De hecho, hay algunas costumbres que pueden ayudar a cuidar la voz, como mantener una buena hidratación, dormir al menos siete horas al día y, por supuesto, no fumar ni beber alcohol, ya que existe una conexión directa entre lo que pasa por la garganta y la afectación de la voz, pues el aparato fonador y las membranas mucosas quedan influenciadas por todo aquello que comemos. «Las bebidas alcohólicas (y también el tabaco) favorecen la aparición de distintas lesiones y tipos de cáncer en toda la cavidad oral, faringe, laringe y esófago, que van a influir en la voz. Es importante evitar estos hábitos tóxicos, mantener una buena higiene oral y cuidado de la boca», recomienda Francisco Pita, miembro del Comité Gestor del Área de Nutrición de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN).

¿Qué hay de la leche con miel y limón?

La sabiduría popular esté plagada de remedios caseros que tradicionalmente han ayudado a mejorar la voz, como el clásico jugo de miel con limón, el propóleo o el jengibre. Sin embargo, «no existe suficiente evidencia científica como para proponer modificaciones o priorizaciones de algún producto sobre otro distinto al de un patrón de alimentación saludable», advierte Pita. De hecho, tal y como destaca Mónica Herrero, miembro del Consejo General de Colegios Oficiales de Dietistas-Nutricionistas (Cgcodn), «sobre la miel y el limón existe una evidencia científica muy limitada sobre que sirva para la tos y el resfriado. La miel se ha usado para aliviar dolencias de la piel y heridas en la antigüedad, pero debemos aclarar que es cruda sin filtrar, por lo que lleva más nutrientes que la que encontramos en el supermercado».

En cuanto al limón, Herrero afirma que «puede ayudarnos a que bebamos más agua, pero la hidratación será porque bebemos agua, no por el limón, pues no hay suficiente evidencia que afirme que el limón es bueno para mejorar la voz».

Otro de los grandes mitos que sobrevuelan el cuidado de la voz es el potencial de los lácteos, pues se tiende a tomar leche caliente con miel, lo que puede convertirse en un error. «La leche y, en general, los lácteos no son los alimentos más beneficiosos para disminuir la mucosidad en la zona. Su efecto suele ser todo el contrario y crean más moco», alerta Herrero.

Reflujo y voz

Más allá de los remedios de la abuela, sí hay algunos factores que aumentan el riesgo de patologías vocales. «Una de las circunstancias que pueden estar más relacionadas con la alimentación y la voz es el reflujo gastroesofágico y las alteraciones que pueden aparecer. En este caso, un consejo sobre postura, horarios y evitar ciertos alimentos que favorecen ese reflujo pueden mejorar la clínica de este problema», reconoce Pita. Y así lo ratifica Herrero, quien destaca que «hay alimentos que irritan y resecan las mucosas del aparato digestivo, lo que provoca reflujo y pueden afectar a la voz, como los zumos cítricos, las comidas pesadas, los alimentos muy fríos o calientes, los picantes, las bebidas con cafeína o el alcohol».

Buena hidratación

En lo que sí hay consenso es que la hidratación se presenta como un ingrediente fundamental. «Pese a que la relación entre hidratación, fisiología y calidad vocal no está totalmente aclarada, la hipótesis es que con la fonación y el contacto de las cuerdas vocales se pierde líquido en la zona de contacto, por lo que a la larga y con la deshidratación hay un mayor gradiente de agresión y modificación en la voz. Lo que sí se ha demostrado es que la hidratación del organismo es la solución más fácil y rentable para mejorar la calidad de la voz, por lo que se apoya la inclusión de la hidratación en un programa de higiene vocal», explica Pita. Por ello, Herrero aconseja «reducir el consumo de productos muy salados, porque deshidratan, mientras que tomar caramelos de menta o limón para suavizar la garganta, aunque pueden provocar un efecto de alivio en el momento, luego deshidratan y generan más sequedad y carraspeo».